Como si se tratara de imágenes posteriores al paso de un huracán, el torrencial aguacero que esté domingo cayó sobre Bogotá dejó más de un estrago. Con lo que tiene a la mano, un hombre sentado en la parte trasera de un BMW saca a "cocadas" el agua que se metió en su carro. Pero por más que se afana, sus esfuerzos son en vano. El computador ya se atrofió y su carro no prende.La obra que Bogotá esperó por 10 años no soportó el primer gran aguacerohttps://t.co/L4JV6MECQh … pic.twitter.com/6AhMBYhQFe— Revista Semana (@RevistaSemana) 14 de mayo de 2017A Johan Rodríguez el cálculo le falló. Venía por la calle 94 -oriente-occidente- rumbo al sur. "Cuando me metí al deprimido vi que estaba con algo de agua. Sí, se veía encharcado pero se alcanzaban a ver los topes amarrillos que dividen un carril del otro. Había tráfico y varios carros adentro. Unos orillados y otros en marcha", relató el abogado del momento en que decidió atravesar la obra. Le puede interesar: El deprimido de la 94 no soportó el primer gran aguaceroUna vez adentro, el agua se mantenía alrededor de unos 20 o 30 centímetros. El problema, sin embargo, llegó cuando se acercaba a la salida que lo conectaba con la Autopista Norte. "De un momento a otro vi que esa cosa se subió en un instante. Fue absurdo. Mi esposa, que estaba con la bebé atrás, entró en pánico cuando el agua le empezó a llegar a las rodillas".Con el carro apagado, como pudo empujó la puerta con los pies y las bajó a ellas. Cuando sacaba la niña tres personas que se dirigían a él, la recibieron mientras él auxiliaba a su esposa. Una vez a salvo, con la ayuda de poco más de seis personas empujaron el carro hasta desenterrarlo y llevarlo al segundo piso, a la autopista. 

En las fotos no se alcanzaba a ver ni la marca y mucho menos las placas de los automóviles que quedaron atrapados en el deprimido de la calle 94. Igual como le ocurrió a Luis Alberto Rincón. Por poco más de veinte minutos el hombre que conducía el vehículo, aguardó con el agua hasta los vidrios que mermara la borrasca para así poderse bajar y pedir ayuda.Le recomendamos: Al mal tiempo buena cara: los memes del deprimido de la 94"Salíamos de la 85 con 13 e íbamos para el sur y pensamos en tomar la 30. Cuando bajamos al deprimido, la camioneta que estaba delante de nosotros se comenzó a devolver. Dijimos: -no nos metamos, pero cuando intente bajarme a tomar una foto me di cuenta que el carro tenía el agua casi llegando a los vidrios. Le grité a mi mamá que llamara a la Policía", relató Paula Ballesteros otra de las afectadas. La obra que había sido inaugurada con festejos el pasado 22 de marzo no resistió el primer gran aguacero. Las imágenes de los carros prácticamente hundidos en un enorme charco se tomaron las redes sociales. No era para menos. La obra que la ciudad esperó por 10 años sucumbió en cuestión de minutos a la inclemencia del agua. "Mi situación se dio sobre las cuatro de la tarde. Realmente solo hubo colaboración de personas, vecinos del sector y dueños de otros carros que no dudaron en bajarse a ayudar. Yo me quedé hasta las siete y media de la noche que llegó mi grúa. La Policía apareció sobre las cinco, los bomberos y la defensa civil a eso de las seis. Cuando la ayuda llegó, inclusive ya hasta el nivel de agua había bajado", manifestó Rodríguez. Este domingo, en solo 40 minutos se registraron 36 milímetros de lluvia, casi un tercio de lo que llovió en todo el mes de abril. Un error humano habría sido la causa de la inundación. De ahí que el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) informó que hará efectivas las pólizas de cumplimiento por el error del contratista que no operó a tiempo maquinaria que hubiera evitado lo que paso. La inundación sirvió para alimentar la pugna que existe contra la actual administración que lidia con la propuesta de una revocatoria. Y es que hace unos días el exalcalde Gustavo Petro dijo que el "deprimido de la 94 lo destrabó la Bogotá Humana, se lo quitó al cartel de la contratación y lo adelantó en un 80 %". Esto, en respuesta a su sucesor que trinó: "Destrabamos deprimido de la 94 y aceleramos obra al máximo. La entregamos marzo 22".

Para los testigos del incidente, además del taponamiento de este domingo hay más cosas por tener en cuenta. "Yo hago ese recorrido siempre, pero es un caos total. En horas pico me he gastado hasta hora y quince minutos para entrar al deprimido. Yo sólo lo sentí útil los primeros tres días. Esa vez, cuando pasé, dije ¡espectacular!. Sin embargo, a la siguiente semana ya estaba colapsada y la percepción que queda es que es pequeña. Un carro se vara o choca con otro y hasta ahí llegó".También le puede interesar: El deprimido de la 94 se demoró más que la ampliación del Canal de PanamáLos bogotanos pagaron ese deprimido en el 2008 por lo que serían 43.000 millones. Pero la obra solo fue entregada 10 años después, el pasado 22 de marzo, con un costo final de 166.000 millones, es decir tres veces más de lo que estaba planeado.