Las autoridades iniciaron hace algunos días las investigaciones para determinar las causas de la muerte de dos soldados, adscritos al Batallón Especial Energético y Vial n.° 2, que se encontraban en una base de la unidad militar en La Jagua de Ibirico, centro del Cesar.
Desde el Ejército Nacional habían confirmado que las muertes no estaban asociadas a coronavirus, así que se concentraron en verificar de qué se trataba esta extraña enfermedad, que además tiene a otros uniformados hospitalizados.
En las últimas horas, el general Luis Fernando Navarro, comandante de las Fuerzas Militares, afirmó que los 60 uniformados aislados en La Jagua de Ibirico “han recibido una atención médica especializada, la dirección de sanidad del Ejército se ha volcado de manera total para atender este caso, determinar qué es y darles una atención médica de calidad y prioritaria”.
El Ejército Nacional sostuvo que los uniformados comenzaron a presentar problemas respiratorios, que estarían asociados a la enfermedad de chagas o, como también se conoce, mal de chagas.
“Los uniformados han sido sometidos a múltiples exámenes y valoraciones de un equipo multidisciplinar de especialistas, los cuales determinaron que el origen y las causas de su patología cardiovascular son secundarias a la enfermedad de chagas”, manifestó el Ejército.
Los soldados están adscritos al Batallón Especial Energético y Vial n.° 2 y prestaban servicios de seguridad en la zona, cuando empezaron a sentir dolor abdominal, fiebre intermitente, malestar general y decaimiento, por lo que inicialmente familiares de los uniformados indicaron que podía tratarse de una intoxicación masiva.
Dicha patología puede causar problemas serios al corazón y estómago, causada por un parásito y se transmite generalmente por algunos insectos, especialmente en áreas rurales.
Se sabe que el pasado viernes falleció en un centro asistencial de Valledupar el soldado Luis Fernando Salcedo Blanco, de 21 años, mientras que en la noche del domingo murió el uniformado Norbey Alejandro Bolaño Sanjuán, quien había sido trasladado junto a sus compañeros a un centro asistencial en Valledupar, luego de que presentaran problemas de salud.
Un equipo epidemiológico se desplazó a las instalaciones del dispensario de la base militar para adelantar las verificaciones correspondientes, según comunicó de manera preliminar la X Brigada del Ejército.
De la misma manera, un equipo psicológico de la institución realiza acompañamiento a las familias de los soldados afectados, quienes habían pedido que se realizará una investigación a fondo, a fin de determinar las causas de la muerte de los dos jóvenes y de la afectación a los otros seis que se encuentran hospitalizados.
La hermana del soldado Luis Fernando Salcedo, Beatriz Salcedo, le indicó al diario El Heraldo que “él fue trasladado a La Loma con problemas en el estómago al parecer por una comida contaminada. Hicimos la denuncia, queremos que nos esclarezcan el tema, hay otros soldados que están delicados de salud”.
El Comando de la Décima Brigada, unidad orgánica de la Primera División del Ejército Nacional, en un comunicado envió un mensaje de condolencias a los familiares y amigos de los uniformados.