Fue hombre de confianza de ‘Mono Jojoy’ –abatido en 2010- y de ‘Pablo Catatumbo’. Hizo parte de la dirección del Comando Central de las FARC. Fue el segundo cabecilla del frente 21. Rodrigo Urbano Osorio, más conocido como ‘César’, un importante encargado de las finanzas de esta estructura que opera en Tolima y Huila, se desmovilizó en la noche de este domingo en el municipio de Aipe (Huila). La noticia no deja de sorprender a más de uno. Es increíble que este hombre, que llevaba 15 años en las FARC y que fue pieza clave para que el grupo subversivo se fortaleciera en esta región del país, se entregara voluntariamente al Gaula Militar del Ejército, con el objetivo de acogerse al Programa de Atención Humanitaria al Desmovilizado. Con él, son 23 guerrilleros los que han desertado en este 2015. Este es un duro golpe para las FARC. Según los estudios de inteligencia del Gaula Militar, en el frente 21 no hay quién asuma el rol de las finanzas. ‘César’ era el encargado de extorsionar a grandes empresarios, comerciantes, contratistas, transportadores, finqueros y directivos y empleados de los proyectos hidroeléctricos del sur de Tolima. Sin embargo, aunque los grandes cabecillas de las FARC tenían su confianza puesta en él, según inteligencia la deserción se produjo luego de que el temido jefe guerrillero fuera relegado de sus funciones en las últimas semanas. “Debido a que no pudo cumplir con todos los últimos planes delictivos ordenados por ‘Marlon’ y ‘Armando Pipas’, cabecillas del Comando Central y del Frente 21; la situación lo obligó a tomar la decisión de fugarse de la estructura el pasado 3 de julio”, explicaron fuentes del Ejército. Así ascendió ‘César’ llegó en el año 2000 como guerrillero raso al frente 21 de las FARC. Un año después, en 2001, fue enviado al Bloque Oriental, a la columna móvil González, donde empezó a escalar y asumir cargos como cabecilla de escuadra y de compañía. En las FARC empezaron a creer tanto en él, que Jorge Briceño, ‘Mono Jojoy’, lo nombró como uno de los encargados de su seguridad. Fuentes del Ejército también aseguraron que este temido guerrillero resultó ser hombre de confianza de ‘Pablo Catatumbo’, actual negociador de las FARC en La Habana. En enero de 2013, cuando el frente 21 estaba debilitado, ‘César’ regresó como segundo cabecilla y jefe de finanzas. A él se le atribuye su presunta participación en los ataques contra los proyectos hidroeléctricos de Hidrocucuana (en Roncesvalles) y Amoya (de Chaparral, ambos municipios en Tolima). El 9 de abril de 2014, coordinó la activación de un artefacto explosivo improvisado en la vereda El Cairo de Chaparral, en el que un soldado resultó muerto.