La banda de cobardes torturadores que cayó en Medellín, gracias a una investigación de la Fiscalía y el Gaula de la Policía, cogió por su cuenta a mujeres, como sádica conducta, al parecer, derivado de una confusa venganza que hasta el momento no tiene otra explicación que un comportamiento misógino emulado en secuestros y torturas, con la falsa excusa de ser atracadores.

Las víctimas eran sometidas a vejámenes, no sexuales, pero si de absoluto desprecio por la mujer, al punto de humillarlas, ultrajarlas, herirlas y recordarles la razón para terminar en la tragedia que estaban viviendo, algunas con secuelas de por vida, con quemaduras y severos daños en su autoestima.

Los delincuentes, después de secuestrar, torturar y atracar a las víctimas, las dejaban amarradas y desnudas en los pasillos de hoteles o edificios de apartamentos. Todo ocurrió en cuestión de horas y después de citar a las víctimas a los espacios que posteriormente se convertirían en la escena del crimen.

“Los investigados son Miguel Ángel Botero Mosquera, María Paula Sierra Alba, William Samuel Suárez Rubiano y David Alonso García Restrepo, quienes entre el 17 de diciembre de 2023 y el pasado primero de abril habrían secuestrado a ocho mujeres en los barrios El Poblado, Suramericana, Laureles, El Rodeo, Belén y Robledo de la capital antioqueña”, explicó la Fiscalía tras lograr su captura.

Miguel Ángel Botero Mosquera y María Paula Sierra, capturados por integrar una banda que torturaba mujeres en Medellín. | Foto: Autor Anónimo

Las declaraciones de las víctimas son aterradoras. Las mujeres cuentan cómo fueron sometidas, bajo la amenaza de cuchillos y ataques con ácido. Todas terminaron en la misma situación, desnudas y humilladas, otras llevaron la peor parte. Fueron quemadas y torturadas con cortaduras en sus senos.

“Me esposó, luego me amarró con un trapo los pies y las manos. Me metió un trapo en la boca, me amarró la boca, me dijo que él sabía dónde vivía, que si hacía bulla, me iban a matar y meter dentro de una maleta, que me iba a prender fuego. A lo último me echó alcohol en todo el cuerpo y me dijo que me iba a prender fuego”, contó otra víctima que sobrevivió al ataque.

La Fiscalía logró recuperar videos de seguridad, conversaciones, documentos y una serie de elementos de prueba que fueron contundentes para demostrar la presunta responsabilidad, pero también obtuvieron las declaraciones de las víctimas, un hecho fundamental para avanzar en la investigación y lograr la captura de los responsables.

Investigación contra una banda de torturadores de mujeres. | Foto: Autor Anónimo

“El líder decía que me dañaran el rostro, que me cortaran el cabello, le decía a la chica, que me cortara con el cuchillo, insinuaba o daba a entender que estaba de afuera no se diera cuenta, le subió volumen al televisor para que no escuchara, para que no escucharan afuera. Esta persona fue la que me ató, dañó las sábanas de la almohada y unió varios pedazos de tela, me puso boca abajo en la cama, después me amarró las manos y los pies, me colocó boca abajo, me metIó un pedazo de tela en la boca”, señalaron las víctimas.

Los cabecillas de esta organización fueron identificados y capturados por la Fiscalía, en particular un hombre y una mujer que tenían antecedentes por hechos similares en la ciudad de Bogotá, también secuestraban y torturaban a mujeres solo por el hecho de ser mujeres.