Con más de 7 millones de personas desplazadas durante el conflicto interno, Colombia es uno de los países con mayor número de desarraigados en el mundo. A pesar del acuerdo con las Farc para terminar el conflicto, la situación no da muestras de mejorar. Por el contrario los desplazamientos al interior del país a causa de la violencia continúan.Más de 1.000 personas fueron desplazadas en cuatro días. Nariño, Córdoba, Antioquia y Boyacá son los departamentos donde se viene acentuando la disputa territorial entre el ELN, las bandas criminales y las disidencias de las Farc. La puja por el control de los territorios y las rutas del narcotráfico afectan a los habitantes de estas zonas. Según alertó la Defensoría del Pueblo, entre el 17 y el 20 de enero estos desplazamientos han sido causados por hechos violentos. Le puede interesar: ¿Por qué se disparó el desplazamiento en Colombia en época de postconflicto?El primer incidente se presentó en el Consejo Comunitario La Voz de los Negros del muncipio de Magüí Payán, Nariño. El mismo municipio donde una incursión armada del ELN, en noviembre pasado, provocó la muerte de 13 personas. Al menos 172 personas se desplazaron el pasado miércoles tras un enfrentamiento entre esa guerrilla y disidentes de las Farc. Se trata del peor enfrentamiento que involucra a civiles desde la firma de la paz. Un segundo incidente ocurrió tras el asesinato de un líder comunitario el pasado 18 de enero. Cerca de 375 personas tuvieron que huir de San José de Uré (Córdoba) por amenazas de miembros del grupo denominado ‘Caparrapos‘ y por los inminentes enfrentamientos entre estos y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), una banda narco de origen paramilitar, según alertó la Defensoría.Puede ver: Los hijos del desplazamientoEn Antioquia 383 personas abandonaron el municipio de Cáceres y otras 125 el de Caucasia el 19 de enero. La presencia de "hombres armados" que anunciaron a los lugareños que se enfrentarían con otro grupo armado, provocó esta emergencia.Por último, tres familias del municipio de Paya, en Boyacá, huyeron el 20 de enero por enfrentamientos entre la fuerza pública y el ELN, y otras se encuentran "en riesgo de desplazamiento", según el informe de la Defensoría. La situación enciende las alarmas en el Gobierno, pues cuando se creía que tras el acuerdo de paz entre las Farc y el Estado se resolvería la situación de orden público, la disputa territorial de otros grupos armados ilegales no permiten terminar con la pesadilla del desplazamiento.