Tras una extensa audiencia, una jueza de control de garantías de Soacha (Cundinamarca) ordenó la detención domiciliaria para los tres motociclistas señalados de arrollar y causarle la muerte a las jóvenes Laura Daniela Gómez y Karen Julieth Martínez, en hechos registrados en la madrugada del 28 de junio de 2024 en la vía entre Sibaté y Soacha, en Cundinamarca.
La fiscal de la Seccional Cundinamarca señaló durante la diligencia que los motociclistas, que hacían parte de una de las llamadas “rodadas”, conducían con exceso de velocidad, arrollando así la moto que conducía Karen Martínez. Tras el hecho, siguieron su curso sin brindarles ningún tipo de ayuda, abandonándolas en la vía.
“La motocicleta que ellas conducían, no cometió ninguna acción imprudente. Las velocidades que todos ustedes; sin embargo, llegaron hasta 140 kilómetros por hora, en un sector donde existe una señal donde marca 30 kilómetros por hora”, indicó la delegada del ente investigador. En este sentido, señaló que los motociclistas tenían conocimiento claro que con su actuar ponían en riesgo a otros sujetos viales que se movilizaran por el sector.
Debido a esto les imputó a los tres hombres el delito de homicidio doloso. Tras la pregunta de la jueza de control de garantías Leonardo Marín Rubiano, Diego Andrés Cuéllar Durán y James Esteban Satoba Ávila manifestaron que no aceptaban los cargos.
La evidencia técnica y los testimonios recolectados permitieron establecer que los ahora imputados manejaban la motocicletas a alta velocidad, realizando maniobras peligrosas de adelantamiento en la carretera.
El video de una de las cámaras de un camión de carga que se movilizaba en esa madrugada por la vía fue clave para determinar la forma en cómo se presentaron los hechos, así como las placas de las motocicletas que arrollaron a las jóvenes y el rumbo que tomaron.
Las pruebas técnicas señalaron que los imputados manejaban entre los 60 y 140 kilómetros, situación que ponía en situación de riesgo a los demás sujetos viales. Igualmente, se tuvo en cuenta que, tras presentarse el accidente, no pararon a atender a las jóvenes quienes se encontraban en el piso.
Igualmente, los testimonios de varias personas permitieron establecer que tras pasarles por encima no tuvieron la más mínima intención de prestarles los primeros auxilios o buscar ayuda.
Para la Fiscalía los motociclistas no tenían la intención de ocasionarles daño a las mujeres; sin embargo, asumieron comportamientos irresponsables y riesgosos en la vía que desencadenaron su muerte.
Karen, según detalló la Fiscalía General, murió en el acto, mientras que Laura Daniel —madre de dos niñas— falleció pocos días después en un hospital por la gravedad de sus heridas.
La fiscal del caso aseguró que los tres imputados se exponen a una condena entre los 208 y 400 meses de prisión.