Querer definir a Boyacá en una sola palabra puede ser algo complicado. Con 123 municipios en su haber, es uno de los departamentos insignias del interior de Colombia, no solamente por ser conocido como el lugar en donde se selló la independencia de Colombia un 7 de agosto de 1819, sino también por su arraigo religioso al ser el reposo del milagro de la Virgen de Chiquinquirá.
Por otro lado, las mejores esmeraldas del mundo se han encontrado en las minas de Muzo, y asimismo las más cotizadas ruanas son hechas en los cientos de telares que trabajan la lana de las ovejas, uno de los animales más queridos por la comunidad boyacense.
Por tal motivo, en pro de destacar el orgullo que sienten más de un millón de personas por haber nacido y vivir en Boyacá, el 2 de octubre ha sido enmarcado como el “Día de la Boyacensidad”, una fecha que busca, año tras año, incentivar el arraigo cultural y social que han tenido los colombianos con este departamento.
En el corazón de Colombia
Boyacá hace referencia al vocablo muisca ‘Boiaca’, lo cual traduce ‘Cercado del Cacique’ o ‘Región de la Manta Real’ dividido por las palabras ‘boy’ que significa manta, y ‘ca’ que quiere decir cercado. Sin embargo, este nombre fue adoptado por el territorio hasta 1821 por el Congreso de Cúcuta, en honor al río Boyacá (antes conocido como Teatinos), lugar en donde se erigió el Puente de Boyacá, un monumento nacional muy importante para los más de 50 millones de colombianos.
A pesar de que Boyacá se estableció como departamento en agosto de 1886, el Día de la Boyacensidad se celebra el 2 de octubre debido a una iniciativa surgida en el 2009 por el exgobernador José Rozo Millán, quien gestionó la expedición de la ordenanza 23 de 2009 por parte de la Asamblea de Boyacá, en donde se declaró ese día como el Día de la Boyacensidad para promover la identidad de la región, exaltar el papel del campesino y enaltecer la cuna de la independencia.
Boyacá en el siglo XXI
Gracias a las plataformas digitales, son cada vez más los colombianos que escogen Boyacá como destino turísticos para pasadías o estadías dependiendo el lugar de interés o el clima que más se acople a sus gustos ya que la región ofrece paisajes nevados como la Sierra Nevada del Cocuy, Güicán y Chita, hasta climas más calientes como en Villa de Leyva o Ráquira.
Asimismo, el turismo religioso no ha dejado de ser un gran ingreso económico para la región, especialmente en el municipio de Chiquinquirá, gracias a la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, cuya advocación mariana es conocida por ser la patrona de Colombia.
La tradición católica también se remonta a la devoción que tenía el neogranadino Simón Bolívar y a quien le consagraba cada batalla durante su periodo como libertador.
Por otro lado, varias figuras de talla mundial como Nairo Quintana, Jorge Velosa y Orlando ‘El Cholo’ Valderrama son referentes que llenan a la cultura boyacense de orgullo en cada una de las disciplinas en que se destacan, criados con agua de panela y almojábanas tradicionales.
La tierra del ‘sumercé', es cada vez más apreciada por los colombianos gracias al papel que cumple en la agricultura nacional, y poco a poco se va consolidando en un departamento en donde las tradiciones campesinas con la innovación de las ciudades pueden ir de la mano sin perder ese factor diferenciador de humildad, tenacidad y lealtad, con el que se describen a los boyacenses y que cada 2 de octubre alzan su voz para enorgullecerse, aun más, de sus raíces bailando al son de la carranga, vestidos de ruana y alpargatas, y disfrutando de un buen cocido con un sabajón.