La inseguridad de Bogotá es uno de los temas que se tocan en el Concejo de la capital del país. Sensación de inseguridad, miedo, balaceras, robos, heridos y muertos tienen el tema en lo alto del debate.

El concejal Samir Abisambra dijo en el cabildo que el hurto a personas, así como a residencias y al comercio, son los más denunciados en Bogotá. Según su estudio, la línea de emergencias 123 ha recibido más de 18.900 llamadas entre enero y febrero de este año por robos.

Las cifras que revela el cabildante del Partido Liberal indican que durante los dos primeros meses de este año 12.744 personas denunciaron el hurto de sus pertenencias. Esto quiere decir, 216 ciudadanos al día. Los datos también muestran que 4.928 denuncias corresponden a víctimas mujeres y 7.807 a hombres.

Las localidades de Engativá, Kennedy y Suba son las zonas que más registran esta actividad delictiva. Otra de las revelaciones es que el rango horario en el que más se reportan denuncias, según las autoridades, está entre las 6:00 de la tarde y las 9:00 de la noche, en especial los días jueves y viernes.

Así mismo, se han registrado 8.322 denuncias por hurto a celulares entre enero y febrero de este año, 1.623 por bicicletas, 1.214 por robo a comercio, 1.057 a personas en TransMilenio y 1.226 a residencias.

La línea de emergencia 123 ha recibido 18.985 llamadas en ese periodo, 12.954 se han realizado cuando el hurto está en proceso, mientras que 6.031 cuando ha sido efectuado.

En relación con la medida de restringir el parrillero domiciliario en moto, el concejal dice que desde los clubes de moteros de Bogotá y Cundinamarca han destacado que esta no es la solución al problema de seguridad en la ciudad.

Es una opción, señala el cabildante, que no ha tenido efecto ni impacto duradero en la reducción del hurto en sus diferentes modalidades y sin una demostración evidente de que el hurto en la ciudad sea exclusivo del parrillero en moto.

Motos en Bogotá. Foto Jonathan Chíquiza/ Semana. | Foto: Jonathan Chíquiza/ Semana

Para el concejal, una posible solución es la inclusión de los moteros en las estrategias y los planes de acción de la Secretaría de Seguridad para hacerle frente al delito.

“De la misma manera, proponemos que la Secretaría contemple la idea de conformar frentes de seguridad con los distintos clubes de moteros y para esto invitamos a que tengamos un diálogo entre las partes y ver si podemos materializar la propuesta establecida”, dijo.

Indica que este trabajo articulado con grupos de ciudadanos y la Secretaría de Seguridad acabaría con la estigmatización del motero como delincuente, ya que menos del 1 % de las motos estaría relacionado con los hurtos que se presentan en la ciudad.