Diógenes Orjuela, secretario general de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), uno de los sindicatos más fuertes del país y que hizo parte del comité del paro del año pasado, publicó una carta en la que rechaza que lo hayan relevado de sus funciones.
Aunque las razones expresadas por sus compañeros habrían sido unas relacionadas a abstenerse de firmar unos documentos, Orjuela asegura que de fondo la decisión se dio por no respaldar a Gustavo Petro irrestrictamente.
“En sesión del Comité Ejecutivo Nacional de la CUT, el día 6 de julio, en votación de 15 a favor y 5 en contra, fue removido de la Secretaría General, el compañero Diógenes Orjuela, con el rebuscado argumento de no cumplir con la función estatutaria de firmar los pronunciamientos y correspondencias de la central, en conjunto con el presidente”, dice la carta que firmó con apoyo de otros miembros del sindicato.
Orjuela señala que el trasfondo de la decisión es una “retaliación política” por haber querido que el grupo sindical mantuviera la independencia al nuevo gobierno de Gustavo Petro, ya que considera que eso va en contravía del espíritu de la agremiación.
“La motivación invocada por la mayoría esconde el verdadero fondo de la decisión: se trata de una retaliación política por haber defendido los estatutos, el pluralismo y los principios de independencia y autonomía de la CUT, frente a poderes extranjeros, el Gobierno, los patronos y los partidos, asuntos que se violan con las declaraciones del Comité Ejecutivo aprobadas los días 31 de junio y 6 de julio para apoyar la candidatura y, luego, el gobierno de Gustavo Petro, respectivamente”, señalan.
Agrega que entre los cientos de documentos que ha firmado como presidente y secretario de la CUT, los únicos dos que se negó a avalar fueron los de esos encuentros por las razones que ya expresó y que en cambio, presentó propuestas alternativas que no fueron tenidas en cuenta.
“De los cientos de documentos expedidos por la CUT en sus diferentes instancias, mientras Diógenes se desempeñó como presidente y luego como secretario general, solo se ha negado a firmar estos dos, argumentando objeción de consciencia ante comunicados de connotación partidista y que ponen a la CUT como apéndice de una coalición política y del próximo gobierno. En ambos casos planteamos fórmulas de redacción que pudiéramos unificarnos, corregir la vulneración de los estatutos y los principios fundacionales y mantener la unidad, pero fueron desechadas”, comentó.
Orjuela, junto a los demás firmantes de la carta, reclaman que es un precedente que los puede dividir y que manda un mal mensaje para los sindicalistas del país. Reclaman falta de independencia hacia el gobierno de turno.
“Como un sector representativo de trabajadores comprometido con el accionar del sindicalismo, tanto en la presidencia de Diógenes como en la de Francisco Maltés, para fortalecer la unidad de la Central y su capacidad de interlocución y movilización, manifestamos preocupación porque al calor de la coyuntura política se tomen medidas tan arbitrarias que dividen y fracturan”, aseguran.
Y agregan a renglón seguido: “Defender la independencia, la autonomía y cuestionar cualquier intento de convertir la CUT en un apéndice del gobierno, no puede catalogarse como una falta y mucho menos que se sancione con el despojo del cargo. Es un pésimo mensaje para la clase trabajadora que precisamente se ha forjado al calor de la lucha política y gremial pero siempre respetando la militancia e independencia de sus agremiados”, dicen en la carta.
La comunicación está firmada por Orjuela como director del departamento de relaciones con los sectores sociales; Victoria Avendaño, directora del departamento de recursos naturales; Omar Giraldo Agámez, director del departamento de empresas transnacionales; Timoteo Romero, tesorero; y Laura Munévar, directora del departamento de la juventud trabajadora.