La Secretaría de Gobierno de Bogotá condenó los hechos donde perdieron la vida Yeisson Anderson Beltrán y Juan Sebastián Arismendi, ambos ocurridos en hechos posteriores a procedimientos adelantados por la Policía Nacional y bajo la custodia de uniformados de la misma institución.
Ante la gravedad de los acontecimientos, el secretario de Gobierno de Bogotá, Felipe Jiménez, interpuso denuncia ante la Fiscalía y queja disciplinaria ante la Procuraduría General de la Nación con el fin que se investigue lo ocurrido y se judicialicen a los responsables, “también le solicitamos a las autoridades suspender a los uniformados que puedan estar implicados en estos hechos hasta tanto se aclare con total veracidad lo ocurrido con las muertes de Yeisson y Juan Sebastián” aclaró el funcionario.
“Desde la Alcaldía condenamos y solicitamos que se investigue a fondo el caso de estos dos jóvenes. Así como respaldamos el ejercicio diario de la Policía por mantener el orden y garantizar la seguridad en la ciudad; también exigimos el estricto cumplimiento de la Ley, la Constitución y el respeto por los Derechos Humanos en nuestra ciudad”, señaló la alcaldesa Claudia López.
La Secretaría de Gobierno contextualizó que Yeisson Anderson Beltrán fue encontrado muerto al interior de un vehículo de la Policía Nacional, horas antes, el joven había sido sujeto de traslado por protección por parte de la Policía Nacional producto de una riña que había sucedido en la localidad de Bosa.
Por su parte, Juan Sebastián Arismendi, de 26 años, fue capturado en Suba y trasladado a la estación de policía de esta localidad, una vez allí, el jóven fue remitido al Hospital de Suba debido a una serie de golpes y heridas encontradas en su cuerpo que le causaron lastimosamente su muerte.
“La muerte de estos dos jóvenes se da con posterioridad a procedimientos policiales, en ambos casos, los hechos ocurrieron bajo la custodia de la Policía Nacional. Expresamos nuestras condolencias y solidaridad a los familiares y amigos de Yeison y Juan Sebastían. Le solicitamos a las autoridades, en especial a la Fiscalía y a la Procuraduría, que se le dé celeridad a la investigación y se permita individualizar y sancionar a los responsables. La Policía en nuestra ciudad tiene todo nuestro apoyo y respaldo, pero ante hechos de posible abuso policial debemos ser contundentes”, señaló el secretario Jiménez.
Desde el primer momento que la Secretaría Distrital de Gobierno tuvo conocimiento de estos lamentables hechos, la dirección de Derechos Humanos activó la Ruta de Atención a víctimas de presunto abuso de la Fuerza Pública. A través de esta se está haciendo acompañamiento a sus familiares, así como orientaciones jurídicas y psicosociales.
Estas son las dos hipótesis sobre las que trabaja la Fiscalía para esclarecer la muerte de Juan Sebastián Arismendi
El primero de abril, Juan Sebastián Arismendi, de 27 años de edad, fue llevado a la estación de Policía en el noroccidente de Bogotá por presuntamente haber participado en un caso de hurto. Allí, uniformados de la estación de Suba lo recibieron.
Según denuncia la misma familia del joven, en la celda a la que ingresó le habrían pedido dinero para estar sin problemas. Horas después de su detención, el joven habría perdido la conciencia, lo que obligó que fuera remitido de urgencias al Hospital Simón Bolívar, donde perdió la vida.
Para esclarecer lo sucedido, la Fiscalía General de la Nación destinó a un fiscal de la Unidad de Vida de Bogotá y se asignó a un grupo de investigadores especializados del CTI, quienes hasta el momento plantean dos líneas de investigación. La primera enfocada a identificar a los autores directos del homicidio de Arismendi. Esas primeras pesquisas han arrojado que los responsables serían otras personas que se encontraban también privadas de la libertad.
Y la segunda línea de investigación va enfocada a identificar los uniformados que estaban encargados de custodiar la estación y que, al parecer, no actuaron cómo debían para prevenir la tragedia; habrían cometido omisión en algunos procesos, pues los policías deben tener una posición de garantes frente a la custodia del joven.
Se espera que la próxima semana la Fiscalía entregue resultados contundentes, luego de los análisis que han hecho de manera multidisciplinaria, pues los análisis de Medicina Legal son claves dentro del proceso.
Precisamente, tras revisar el material probatorio, la hipótesis que maneja la Fiscalía es que están “frente a un desafortunado caso de Homicidio que se vuelve a presentar en la ciudad de Bogotá, en las estaciones de Policía y en los sitios de detención”, dijo José Manuel Martínez, director de Fiscalías de Bogotá.
Frente a las responsabilidades penales que se avecinan, también hay dos campos diferentes. En primer lugar, los privados de la libertad que actúan de manera directa en las lesiones del joven y, la segunda, las omisiones en las que pueden estar involucrados los miembros de la Policía, a quienes también ya les abrieron una investigación en la Procuraduría por no haber velado, al parecer, por la integridad de la víctima.