En la capital del Magdalena, más de 12 barrios actualmente no cuentan con servicio de agua, esta situación se ha extendido desde hace 25 días. La comunidad se encuentra desesperada y exige al Gobierno nacional que brinde soluciones a esta problemática.

Entre los barrios afectados están: Altos Delicias, Ensenada, San Jorge, Juan XXIII, San Fernando y otros sectores vecinos. Sus residentes han optado por recorrer hasta un kilómetro en busca de este recurso, porque, al parecer, el agua no llega hasta el acueducto de dichas zonas.

Es impresionante que en medio de la fuerte ola invernal que atraviesa el país y el flujo de los cuerpos de agua es mayor, la empresa Superservicios no garantiza el acceso a este servicio de primera necesidad.

Una de las más grandes preocupaciones es el momento en que lleguen las épocas de sequías, puesto que por el momento las lluvias han logrado solventar un poco la necesidad; sin embargo, si con las fuertes lluvias no llega el agua hasta estos sectores, qué pasará cuando no haya precipitaciones. Esta es la mayor incertidumbre.

Cerca de mil familias son las afectadas de esta problemática, quienes manifiestan que han estado consumiendo agua de “pozos artesanales”, pero esto representa un gran riesgo para la salud, de hecho, niños y adultos ya han presentado síntomas de enfermedades estomacales, al parecer, por consumir esta agua.

Otra alternativa es la compra de recipientes y el alquiler de una carreta para poder acceder a este recurso natural. Una caneca de agua puede costar 2 mil pesos, asimismo, los tanques de mil litros tienen un valor de 50 mil.

Por el momento, las autoridades competentes no se han manifestado con respecto a esta problemática que aqueja a más de mil familias de la zona.

Restricciones de movilidad en el Centro Histórico de Santa Marta

Desde el pasado martes 1 de noviembre comienzan a regir las nuevas medidas de movilidad en el Centro Histórico de Santa Marta por el inicio de las obras de reconstrucción de la carrera quinta.

De acuerdo con el decreto emitido por la administración distrital, el ingreso de carros particulares y los diferentes tipos de motocicletas quedará prohibido desde la calle 22 hasta la avenida del Ferrocarril, excepto para vehículos que presten servicio de mensajería y domicilios en el ejercicio de su objeto comercial y que su conductor esté debidamente identificado con carnet y uniforme.

“Con el fin de avanzar en el proceso de implementación del sistema estratégico de transporte de la ciudad se adelanta proyectos y obras de infraestructura requerida para el buen funcionamiento del sistema incluida la reconstrucción de la carrera quinta”, se lee en el decreto 296 del 26 de octubre.

Se evidencia que el mayor impacto del proyecto se encuentra encaminados al número de peatones que transitan por la carrera quinta y por ello resulta necesario priorizar la circulación de peatones y bicicletas”, resalta el documento.

Los buses del transporte público colectivo y taxis, podrán ingresar a la carrera 5ta desde la calle 22 hasta llegar a la calle 15, en donde deberán girar a la derecha. Por lo tanto, el parqueo de todo tipo de vehículos quedará prohibido sobre esta vía.

La carrera séptima cambiará su sentido vial quedando de sur a norte y únicamente podrá ser transitada por carros particulares, motocicletas, mototriciclos, motocarros, cuatrimotos y taxis. La circulación del transporte público colectivo, camiones con una altura mayor a 3,4 m y/o mayor a 3,1 metros de ancho incluidos los espejos, retrovisores, estará prohibida en esta vía.

Asimismo, no se permitirá el parqueo de vehículos sobre la carrera séptima, con el fin de minimizar la obstrucción en la movilidad y facilitar el tránsito vehicular.