Con el tradicional saludo protocolario Iván Duque y Donald Trump estrecharon sus manos para la fotografía oficial. Los dos presidentes sostuvieron una reunión que tuvo como ejes centrales la política antidrogas, el crimen organizado, la seguridad energética y la crisis en Venezuela. Al salir hablaron a los medios y según sus declaraciones la lucha contra el narcotráfico quedó como la promesa bandera del gobierno colombiano.
“Una de las razones por las que me siento tan complacido de ver la victoria de Duque es por su lucha contra el narcotráfico. Ahora, si le va bien fabuloso, pero si no le va bien será un presidente más de Colombia. Yo creo que él sí va a cumplir”, explicó Trump. Duque, por su parte, hizo hincapié en la lucha contra las drogas, justo ahora que los cultivos ilícitos aumentaron un 17 por ciento durante el año pasado, es decir pasamos de 146.000 hectáreas en 2016 a 171.000 en 2017, según el último informe del SIMCI de Naciones Unidas. “Queremos fortalecer los vínculos entre Colombia y Estados Unidos porque compartimos los valores democráticos, al igual que la preocupación por combatir el narcotráfico. Por eso le agradezco no solo sus palabras, sino el respaldo que hemos recibido de su administración”, dijo Duque. En video: Las risas que provocó el discurso de Trump en la ONU Además, el presidente Duque reiteró que están muy comprometidos en la lucha contra las drogas que va más allá de la interdicción y que por eso desde el primer día de su administración “iniciaron una serie de políticas para desmantelar los carteles, también le vamos a hacer frente a la prevención”. Además, Duque recordó que en los próximos días firmará el decreto que le da facultades a la Policía para que incaute la dosis mínima en lugares públicos. “"No queremos ver más consumidores en Colombia, no queremos ver a más familias destrozadas por las drogas ilegales"”, dijo Duque.
En cuanto a la crisis venezolana, el presidente Donald Trump no volvió a mencionar una posible intervención militar, pero, ante la pregunta de si esa posibilidad se estaba considerando respondió evasivamente y recalcó las fallas del régimen al que calificó de “barbárico”. Le recomendamos: Intervención militar, jugando con candela “Usted está preguntando por el régimen de Maduro que obviamente no está cumpliendo su labor, es barbárico, la gente está viendo lo que está sucediendo. Es uno de los peores lugares del mundo hoy en día, a nosotros no nos resulta aceptable, también a sus países vecinos les resulta inaceptable. Muchos de esos países -incluido Colombia- están acogiendo a los refugiados y eso está impactando”, dijo Trump, quien después agregó que un golpe de Estado podría ser la vía para sacar a Maduro del poder: “Es un régimen que, francamente, podría ser derrotado muy rápidamente si los militares deciden hacer eso”.
Colombia y Estados Unidos ‘renarcotizan‘ sus relaciones Al posesionar a Francisco Santos como embajador de Colombia en Estados Unidos, Duque le encomendó una misión: fortalecer las relaciones bilaterales y ‘desnarcotizarlas’. Esto último es lo más complejo de hacer justo cuando los cultivos ilícitos aumentaron un 17 por ciento durante el año pasado. Por tanto, ‘desnarcotizar’ la agenda no es muy realista, porque el efecto está siendo exactamente el contrario, las relaciones se están ‘renarcotizando’. “Esa narcotización de la agenda internacional se presentó en administraciones anteriores: durante el gobierno de Belisario Betancourt, de Virgilio Barco, incluso de César Gaviria. Lo que trajo graves problemas para Colombia, y el esfuerzo evidentemente es desnarcotizar la agenda. Sin embargo, dada la proliferación de tráfico de drogas, los cultivos ilícitos y la actitud que el gobierno de Estado Unidos está tomando sobre el particular se me hace muy difícil que el problema de las drogas pueda irse de una forma definitiva de la política internacional colombiana en este momento”, aseguró el excanciller Julio Londoño. El gobierno Duque ha prometido ser efectivo en su política antidrogas. El presidente explicó que quieren combinar todas las formas posibles para disminuir los cultivos: sustitución, erradicación, herramientas de precisión y la fumigación. Esta última en medio de la polémica por el inminente regreso del uso del glifosato. Su meta es ambiciosa: disminuir en un 70 por ciento las hectáreas cultivadas en los cuatro años de su mandato. Según explica Rafael Piñeros, coordinador de Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad del Externado, esta meta es osada, pues incluso el anterior ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, dijo hace poco más de un año que si él no lograba erradicar 50.000 hectáreas de cultivos ilícitos renunciaría porque debía frenar el aumento, sin embargo, las cifras reveladas por el SIMCI demuestran que incrementaron en proporción. Por eso, explica Piñeros, para Colombia es muy difícil plantear una agenda diversificada cuando hay presión de Estados Unidos para que haga más en torno a la lucha contra las drogas y dé mejores resultados. Escucha"¿Duque, el nuevo mejor amigo de Trump?" en Spreaker.