El presidente de la República, Iván Duque, arremetió en contra del director para las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, en respuesta a la carta que este envió al secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en la que pidió que no apoyara al Gobierno colombiano.
El jefe de Estado señaló que Blinken no va hacerle el juego a quienes buscan un protagonismo mediático. Además, fue enfático en señalar que lo que existe es una relación de Estado a Estado.
“Yo creo que el secretario de Estado de Estados Unidos, por quien tengo un profundo respeto, no atiende a presiones de nadie, aquí hay una relación de Estado a Estado y hay gente que le gusta el protagonismo y que le gusta siempre buscar primeras planas”, sostuvo Duque.
Y agregó el jefe de Estado en su declaración: “Aquí lo importante es trabajar, y trabajar con efectividad, ver nuestra economía creciendo, generando empleo y oportunidades en todo el territorio nacional. Eso es lo que hemos hecho”.
También señaló: “Por eso, algunos quieren sacarle provecho a la visita del secretario Blinken. Él no va a servirse para que vengan otros a tratar de opacar su visita haciéndoles el juego del protagonismo mediático; él viene a trabajar en una agenda migratoria y con Colombia en distintas materias”.
Sobre la carta que envió Vivanco a Blinken, en uno de los apartes advierte que muchas comunidades rurales corren el riesgo de volver a los niveles de violencia previos al proceso de paz.
“Cinco años después del Acuerdo de Paz de 2016, Colombia se encuentra en una coyuntura crítica. La administración del presidente Duque ha aplicado varias políticas equivocadas y disfuncionales, incluida la política de drogas, y ha habido un aumento de los abusos por parte de grupos armados”, alertó Vivanco.
En ese documento, el director para las Américas de Human Rights Watch solicitó que el Gobierno de Estados Unidos no apoye el regreso de la aspersión aérea en cultivos ilícitos.
“La administración Duque ha tomado medidas para reinstaurar la fumigación aérea de cultivos de coca con glifosato. La fumigación, que Estados Unidos ha defendido y financiado durante muchos años, plantea una grave amenaza a los derechos humanos básicos en Colombia y fue suspendida en 2015 debido a su riesgo para la salud y el medioambiente”, plasmó en el documento.
Hace varias semanas, el presidente Iván Duque afirmó que uno de los temas que más fracturó a Colombia fue la intención de algunos sectores que hace varios años pretendieron dividir al país entre amigos y enemigos de la paz, situación que según señaló el mandatario, desató una profunda polarización.
“Cuando en la sociedad, en nuestra sociedad, los enemigos de la paz han sido quienes a través de la violencia y de acciones criminales han pretendido intimidar a la ciudadanía y afectar la vida, honra, bienes, derechos y libertades de los ciudadanos”, aseguró en esa oportunidad.
En esa ocasión, el primer mandatario hizo una reflexión sobre el proceso de paz que firmó el gobierno anterior con la extinta guerrilla de las FARC y frente a la etapa de implantación de los acuerdos, aseguró que el negociador de ese grupo subversivo, alias ‘Iván Márquez’, ahora es un peligroso terrorista.
“Clave tener en cuenta lo siguiente y es que así como se le exige al Estado, también es muy importante que en estos reportes se haga mención a lo que corresponde también del otro lado, y lo digo porque el jefe del equipo negociador del otro lado está hoy en el terrorismo”, insistió.