“¿Acaso la persona honesta está exenta de que sea víctima de una intoxicación etílica como la que sufrió Álex Flórez esa noche? ¿Acaso a nadie le ha ocurrido, al menos en una ocasión en la vida, y más en la juventud, una intoxicación por alcohol donde no recordemos episodios de la noche y mucho menos hayamos sido consciente de los mismos?”.
De esta forma, la defensa del senador del Pacto Histórico le pidió a la Procuraduría General emitir fallo absolutorio dentro del proceso disciplinario que se le adelantó por haber insultado a un grupo de policías que lo requirieron cuando pretendía, bajo los efectos del alcohol, ingresar a un hotel en el Centro Histórico de Cartagena en la madrugada del 2 de septiembre del 2022.
En esa oportunidad, tras ser requerido por los policías que llegaron al hotel tras recibir una alerta por parte de los mismos trabajadores, el senador los insultó llamándolos “asesinos y cobardes”. Mientras intentaba ser controlado por su escolta y otros uniformados, el dirigente político sacó su teléfono celular para grabar lo que estaba sucediendo sin parar sus insultos a los policías.
Sin embargo, para la defensa del congresista, los bochornosos hechos se presentaron porque, evidentemente, Flórez tenía un problema con el alcohol. Sin embargo, esto hacía parte de su vida privada y no tiene relación alguna con las funciones que ejercía como Senador. “No existe quebrantamiento de ningún deber funcional, y que la conducta se enmarca en la esfera última de la persona, cuyos estragos en su vida misma ya resultan reproche suficiente, como la exposición vergonzosa de su intoxicación a nivel nacional”.
Igualmente, todos los calificativos que emitió en contra de los policías que llegaron al hotel tenían una justificación, puesto que en días anteriores el senador había denunciado públicamente la masacre de tres jóvenes en el municipio de Chochó (Sucre) a manos de agentes de la Policía. Por esto, sentía una especie de “dolor” por lo ocurrido. Su estado de embriaguez ayudó para que sacara a flote todo lo que tenía en contra de la Institución.
“Hay una justificación adicional y es el intenso dolor que siente Álex Flórez con las víctimas y familiares de las violaciones de los derechos humanos causadas por la Fuerza Pública, y que había denunciado justamente en días anteriores, que fácilmente afloraba en las condiciones en que ocurrieron los hechos, en el que en un grave estado de embriaguez, en su ámbito personal, desorientado e incoherentemente, ante la imagen de la fuerza pública lanzó expresiones asociadas a los delitos que él había denunciado”, asevera uno de los alegatos de conclusión.
Para la defensa de Flórez en este caso no puede obviarse el hecho que su cliente se encontraba en estado de embriaguez por lo tanto no tenía la capacidad de “razonar y discernir adecuadamente” en el momento en el que lanzó esos improperios en contra de los policías. “No podía valerse por sí mismo, y quien antes que un victimario como se le quiere hacer ver fue también víctima de las vicisitudes peligrosas de la noche y de mezcla de licores”.
Esta situación lo convierte, inmediatamente, en una persona inimputable. Los videos grabados por el mismo senador, los policías y varios testigos dejan ver que estaba “muy ebrio” y no coordinaba su dicho. A esto se le suma el hecho que los señalamientos los hizo de manera general, es decir la Institución, y no en contra de un policía en particular. “Lo dice de manera textual y clara. En Colombia no existe la calumnia contra persona jurídica (atipicidad)”.
“Se demostró que la conducta desplegada no tiene relación o condición con sus funciones o cargo, hace parte de su desarrollo personal y privado”, aclara la petición de absolución presentada por la defensa de Flórez quien ha manifestado que, después de los bochornosos hechos, fue y le presentó excusas de manera personal a los policías que estuvieron esa madrugada.