Luego de haberse inventado toda una historia alrededor de un supuesto naufragio en el que su esposa desapareció, Lewis Bennett admitió haberla asesinado. La mujer, Isabella Hellman, era una colombiana que se dedicaba a la venta de bienes raíces. El caso se abrió el 15 de mayo de 2017, cuando Bennett, quien había salido a navegar con su pareja y estaba cerca al mar cubano, hizo una llamada de emergencia en la que aseguró que Hellmann había desaparecido. Un día despues, el hombre fue encontrado abordo de un bote de emergencia. Cuando fue interrogado por los hechos, aseguró que una embarcación desconocida impactó el catamarán en el que viajaban y los hizo naufragar. Cuando él se dio cuenta de la emergencia, dijo, su esposa ya no estaba. Puede leer: La muerte acecha en altamar: la impresionante historia de dos náufragos colombianos La pareja llevaba tres meses de casada cuando ocurrieron esos hechos, y eran padres de un pequeño bebé, según relató la BBC, que reconstruyó la historia. Para la familia de Hellmann y los investigadores estadounidenses del caso, la versión que entregó Bennett no era convincente. Primero, el hombre tuvo que afrontar un juicio por un botín de monedas de oro antiguas que le encontraron en su embarcación y también en su vivienda. Fue condenado a siete meses de prisión por contrabandear con esas piezas, que le había robado a un empleador suyo. En medio de las pesquisas por la desaparición de Hellmann, los investigadores también notaron que su embarcación no tenía muestras de haber sido impactada, como él lo narraba, y que fue hundida voluntariamente. Según la BBC, los investigadores creen que Bennett pretendía heredar el apartamento que Hellmann tenía en la Florida, y el dinero de sus cuentas bancarias. Finalmente, tras negociar con la justicia, el hombre aceptó cargos por "asesinato involuntario" y está a la espera de que un juez estadounidense determine el monto de su condena.