En la investigación por el fallecimiento del estilista Mauricio Leal, hallado muerto el 22 de noviembre pasado junto a su madre, Marleny Hernández, aparecieron nuevos componentes. SEMANA reveló la existencia de una oficina, cerca de la peluquería que él tenía, en la que manejaba sus cuentas y se encontraron movimientos financieros extraños. Seguimientos, chats y videos forman parte del rompecabezas.

También una serie de charlas en chat de WhatsApp y entre los cientos de audios que son analizados hay uno premonitorio. Leal murió en la víspera de su cumpleaños, sin saber que le estaban preparando una fiesta sorpresa. Todo estaba listo para que su familia y empleados, a quienes consideraba como tal, se reunieran en un exclusivo restaurante. Su mamá estaba coordinando la celebración con Karen Ruiz, la directora de márketing del salón de belleza. Ella lanzó una frase, que bien parece hoy una sentencia: “Mija, segura no es sino la muerte, no más”.

Marleny: Hola, Karen, buenos días, cómo amaneció, él sí va a estar el 24 acá. Sino que él se va el 25 de madrugada a hacer un trabajo, pero el 24 sí va a estar acá para que arregle todo, gracias.

Karen: Listo, sí, señora, perfecto. ¿Cien por ciento segura, cien por ciento hipermegasegura?

M.: Mija, segura no es sino la muerte, no más. Pero yo ya hablé con él, y me dijo, yo el 24 sí voy a estar allá, pero el 25 me toca madrugarme; y yo, ah, bueno, papi, entonces sí, si Dios quiere.

K.: Listo, doña Marlén, a qué horas quieres que ponga la reserva, porque, si tiene que madrugar, la idea es que no sea tan tarde; Claudita me había dicho que a las siete de la noche. ¿Qué opinas?

Son muchas las piezas del rompecabezas en el que se ha convertido el doble homicidio de Mauricio Leal y de Marleny, su mamá, varias de ellas reveladas por SEMANA. Primero fue la escena del crimen: los cuerpos estaban ubicados en una cama amplia de sábanas blancas, con una caja de medicamentos sin identificar. Mauricio, con las manos cruzadas a la altura de su abdomen, sostenía uno de los dos cuchillos encontrados en la habitación. Del otro solo se halló el mango. Su madre estaba cubierta con una cobija, también con una herida en el abdomen. La escena estaba tan cuidadosamente planeada que no hay duda para los investigadores de que fue un montaje.

De igual forma sucede con la nota apócrifa, encontrada al lado del cuerpo de Mauricio y que decía: “Los amo, perdónenme, no aguanto más, a mis sobrinos y hermano dejo todo, con todo mi amor; perdóname, mamá, 11.24″. Está la sorpresiva herida en la mano de Jhonier Leal, hermano de Mauricio; la última conversación de chat que tuvo con Jaír Ruiz, su conductor, y que hoy parece no haber sido escrita por el famoso estilista.

Entre el material recaudado se encuentra también la declaración de Ruiz a la Fiscalía, de la cual SEMANA conoció y publicó su contenido. Y la sorpresiva noticia de que el hermano menor de Mauricio, Carlos Andrés García, estaba preso en la cárcel de Jamundí desde 2016, pagando una condena de 15 años por el delito de actos sexuales con menor de 14 años.

Ahora, el hallazgo de la desconocida oficina donde se manejaba la contabilidad de los negocios de Leal, que ya tiene la sombra de presuntas operaciones de lavado de activos. Por último, la identificación de personas sospechosas que merodeaban la peluquería y la casa del estilista. Todos estos factores hoy son evaluados por los investigadores de la Fiscalía, y hay algo claro: en los próximos días se anunciarán las primeras capturas.

De otro lado, Jhonier Rodolfo Leal, hermano del estilista fallecido Mauricio Leal, habló con Vicky en Semana. Lo hizo en medio de las investigaciones que adelantan las autoridades y de las conjeturas que se han hecho respecto a qué pudo suceder para que su madre y su hermano terminaran muertos. Ahí fue consultado sobre el 11.24 de la carta que estaba junto a los fallecidos, para saber si en realidad hacía énfasis a la fecha de su cumpleaños.

Las autoridades investigan una misiva que supuestamente dejó el estilista en la cual se lee: “Los amo. Perdónenme, no aguanto más. A mis sobrinos y hermanos dejo todo. Con todo mi amor, perdóname, mamá. 11.24″. En su momento se dijo que el número estaría relacionado con el 24 de noviembre, fecha que es objeto de investigación.

Jhonier Leal respondió al respecto en Vicky en Semana: “Lo que hemos visto por redes sociales, algo así como perdónenme, no puedo más, los amo. A mi sobrino y hermano dejo todo con todo mi amor. También decía perdónomo mamá, no decía perdóneme, como si se hubiera equivocado al escribir. Y abajo ponía los números 11.24, que es la fecha del cumpleaños de él: 11 por noviembre y 24 por el día. Ya mucho más adelante nos dimos cuenta de que esa era también la clave de su celular. Entonces logramos deducir que es la fecha de su cumpleaños y la clave del celular”.