La molestia del presidente Gustavo Petro, su hijo Nicolás y la bancada de seguidores, con la decisión de la Fiscalía de compulsar copias por las declaraciones que entregó el mismo Nicolás Petro, tiene más de emoción que de argumentación. Además, olvidó el presidente que hace dos años se hizo el mismo procedimiento con su antecesor, Iván Duque y la llamada “Ñeñepolítica”.
El presidente Gustavo Petro aseguró, en sus redes sociales, que la decisión del ente acusador, como hace ocho años, lo que busca es “encarcelarlo” como con otras investigaciones. Advirtió que el interrogatorio a su hijo fue ilegal y un “golpe contra la constitución”
“El fiscal general compulsa copias contra mí, basado en un interrogatorio no legal en donde el interrogador de su entidad hace preguntas sobre mí, cuestión que es un verdadero golpe contra la constitución, dado que yo soy un aforado, como senador en ese entonces y como presidente ahora”, dijo el presidente.
Lo que, al parecer, desconoce el primer mandatario es que la Fiscalía está en la obligación de hacer las compulsas de copias cuando a su conocimiento llegan datos o informaciones de relevancia penal, pero que serían competencia de otras autoridades, como ocurrió con Nicolás Petro y su explosiva declaración, revelada en SEMANA.
La decisión de compulsar copias, que el presidente la atiza de política o persecución, no resulta una novedad en la Fiscalía, pues en otras oportunidades y con otros presidentes se hizo lo propio ante declaraciones o informaciones que comprometieron a aforados constitucionales, por ejemplo en el caso de la “Ñeñepolítica” y las versiones que tenían el nombre del entonces presidente Iván Duque.
Además, el presidente Gustavo Petro desconoció o ignoró que el encargado de la investigación y quien tomó la determinación de compulsar las copias fue un delegado, no el fiscal general Francisco Barbosa, que entre otras cosas se lo recordó al primer mandatario tras insistir que las decisiones de los fiscales son autónomas.
“Yo no soy el fiscal del caso… el fiscal general no compulsa copias a la Comisión de Acusación. Es una decisión del fiscal autónomo e independiente, que lo hace porque le compete que, cuando hay un posible hecho constitutivo de delito, envíe al competente”.
La Fiscalía concluyó, luego de escuchar a Nicolás Petro en el interrogatorio que se convertiría en el inicio de un proceso de colaboración, que lo dicho por el delfín del petrismo, era de extrema gravedad y que en virtud de esa misma declaración, era necesario compulsar las copias a las autoridades de acuerdo a su competencia.
“Lo anterior, en el entendido que, en el interrogatorio a indiciado realizado el pasado 02 de agosto al señor Nicolás Fernando Petro Burgos, dentro del proceso que se lleva en su contra, el investigado, en presencia de su abogado de confianza, realizó algunas manifestaciones sobre la presunta materialización de conductas delictivas como el ingreso de dineros aparentemente irregulares a la campaña presidencial del doctor Gustavo Francisco Petro Urrego, actual presidente de la República de Colombia”, dijo la Fiscalía.
Las compulsas de copias se hicieron y causaron un revuelo político judicial, tan vehemente y con tan escasos argumentos legales, que más parecía un debate electoral que un procedimiento judicial. La reacción del presidente Petro no afecta el trámite, será investigado por las declaraciones de su propio hijo y la Fiscalía buscará una condena contra Nicolás Petro.