SEMANA conoció el expediente completo del caso Mauricio Leal y las declaraciones contenidas revelan detalles de lo momentos previos y posteriores del doble asesinato del estilista y de su mamá, Marleny Hernández.
Un testimonio, de Karen Ruiz, amiga y empleada de Mauricio en su peluquería, le contó a los investigadores de la Fiscalía cómo se enteraron de las muertes y qué pasó al interior del establecimiento.
Karen es hija de Jair Ruiz, también amigo de Mauricio y que en momentos le ayudaba como conductor. La testigo le contó a la Fiscalía que el lunes 22 de noviembre tenían pendientes varios contratos y compromisos de trabajo en la peluquería y le pareció muy extraño que Mauricio no llegara al sitio.
Le pidió a Jair que le escribiera a Mauricio y ahí fue cuando recibió una respuesta, que en criterio de los testigos, no fue redactada por el estilista. Luego, se comunicaron con Jhonier Leal y les advirtió que Mauricio se quedó dormido, no quería que lo molestaran. Finalmente, el conductor y el hermano del estilista decidieron ir hasta la casa en la vía La Calera, donde encontraron los cuerpos de las víctimas.
“Karen, están muertos, los acabo de encontrar. Yo le digo si me está tomando el pelo porque no puede ser verdad y él me dice sí es verdad, hay un tarro de pastillas de dormir y están con sangre”, dijo la testigo a la Fiscalía una vez su papá le confirmó la muerte de Mauricio.
En ese mismo momento, asegura la declarante que mientras lloraba le informó a la administradora de la peluquería, que repite la escena de llanto y dolor tras conocer la tragedia. Allí mismo llega una de las empleadas más antiguas del establecimiento y les rogó por la verdad. “Luego entra La Bekan al cuarto y el primo de Mauricio, llamado Andrés David, empiezan a decirme qué le pasó a Mauricio y yo sigo llorando y ellos entendieron lo que había sucedido”.
Dice Karen en su declaración que, luego de esto y durante toda la tarde, empezaron a recibir llamadas de diferentes partes de Colombia y hasta de México, tratando de enterarse de primera mano qué ocurrió con Mauricio. Incluso, advierte que varias personas seguían llamando para apartar citas con el estilista, por lo que debieron inventar algunos daños en el edificio para cancelar todos los compromisos de ese día.
“Una vez se fueron las clientas, nos reunimos en el quinto piso en el comedor de empleados para decir que no fueran a hablar con nadie y que dijeran que no teníamos información alguna. Después de esto, a la peluquería llegó Edwin Bolívar y Maryori, trabajadores que llegaron a llevar unos tintos, aromáticas y comprar unos termos para llevar a la casa de Mauricio”, explicó Karen en su declaración.
Aseguró que solo un día después de ocurrida la tragedia, Jhonier Leal se comunicó con ella para preguntarle si era prudente hacer un video como parte de la celebración del cumpleaños de Mauricio, un día después, el 24 de noviembre. Ella le dijo que sí quería hacer ese video, porque era el compromiso que tenía con la señora Marleny Hernández, la mamá del estilista, también asesinada en esa casa.
“Ahí me despido y ya luego yo llamo a Esteban Buitrago a las 2:48 de la tarde para decirle lo que Jhonier quería, a lo que él me responde “dile que deje de preocuparse por videos chimbos y que los que se murieron fueron la mamá y el hermano”. Ahí me dice que él no va hacer nada y que va a hablar con la contadora”, dice la declaración.
Cuentan que, al hablar con la contadora de la peluquería, ella le recomienda manejar todo con cuidado, pues Jhonier justamente quedaría como el heredero de toda la empresa y es mejor explicarle que están afectados con lo sucedido y así no tendrían problemas con él.
Son varias las declaraciones que tiene la Fiscalía y que ayudaron a construir no solo el perfil de Jhonier Leal, como el asesino de su hermano y su mamá, sino que se convirtieron en prueba suficiente para la imputación de cargos y la posterior aceptación de responsabilidad.