El expresidente Álvaro Uribe Vélez le respondió este domingo, 17 de diciembre, al exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, sobre una nueva polémica que surge de sus declaraciones frente a una supuesta relación con el exmandatario colombiano.

“Mancuso, sinvergüenza, antes decía que cuando pasaban por el Ubérrimo no miraban porque yo no ayudaba”, escribió el exmandatario en sus redes sociales, tras las declaraciones que entregó el exjefe paramilitar en entrevista con María Jimena Duzán.

“Esta finca está cruzada por vías públicas y la casa está sobre una vía, donde usualmente dejan los carros de los visitantes, inclusive de la Fuerza Pública como lo hizo el coronel Suárez cuando fue a preguntar por mi seguridad”, resaltó Uribe Vélez.

Además, fue enfático en afirmar que el ahora designado por el Gobierno del presidente Gustavo Petro como gestor de paz tendrá que probar cada una de las cosas que viene diciendo, tras su aceptación en la Justicia Especial para la Paz (JEP).

“Tendrá que probarme que pasó de la calle, que conversó conmigo, cuando siempre dijo lo contrario. Sobre la reunión negada por el propio coronel Suárez, el bandido respondió a una pregunta ante fiscales que no hablamos de paramilitarismo en Antioquia. Dos razones le mandé: extradición y denuncias penales, aquí y en USA. Cuando la visita del Cr Suárez, 1995 con posibilidad hasta agosto de 1996 que terminó su periodo como Cte Policía de Montería, en el Ubérrimo existía solamente un campamento sobre la carretera”, señaló el exmandatario.

El choque entre Uribe y Mancuso

Álvaro Uribe Vélez y Salvatore Mancuso han venido chocando constantemente en el último mes, desde cuando el exjefe paramilitar lo vinculó con la masacre de El Aro y citó un supuesto encuentro que se habría dado en la finca del Ubérrimo con el coronel Raúl Suárez.

En noviembre, Uribe negó dicha reunión y se respaldó con la versión que Suárez le dio a la Fiscalía, cuando se le indagó por ese presunto episodio: “No tenía confianza de amistad ni parentesco con el doctor Álvaro Uribe. Es decir, es inadmisible que yo me hubiera reunido o le hubiera presentado al señor Salvatore Mancuso o viceversa”.

Expresidente Álvaro Uribe Vélez y Salvatore Mancuso, excomandante de las AUC. | Foto: SEMANA y JEP

Así las cosas, la relación del uniformado con el exmandatario se habría limitado a brindarle garantías de seguridad por las amenazas que corría en ese momento: “En ocasiones, me correspondió instalarle el servicio de seguridad y nada más”, y desconoció cualquier tipo de acercamiento con Mancuso, contrario a la versión que él suministró en la JEP.

Para desligarse de los presuntos nexos con el paramilitarismo, el líder del Centro Democrático también referenció el libro ‘Mi confesión’, donde Carlos Castaño afirmó que no lo conoció personalmente ni respaldó su candidatura presidencial, pues lo consideró como una piedra en el zapato para las Autodefensas Unidas de Colombia.

“Es el presidente que menos nos podrá ofrecer, seguro dará resultados militares en contra nuestra y poco reconocimiento a nuestra lucha antisubversiva”, se lee en el documento compartido en la red social X por Uribe, donde igualmente refutó el supuesto apoyo que le habría dado Mancuso en las elecciones nacionales de 2002, expresado al padre Francisco de Roux.

Todo esto, para concluir: “Mancuso miente. Dijo que Castaño me apoyó. Castaño, a quien nunca conocí, dijo lo contrario, que era perjudicial para ellos. Aquí la cita de su escrito. Mi rechazo al apoyo que Mancuso dijo dar a mi persona en conversación con el padre De Roux. JEP considera que refritos de Mancuso son novedosos. Lo acepta, con impunidad”.