El exsenador Iván Moreno Rojas, quien pagaba su condena en la cárcel La Picota, en Bogotá, por su implicación en el Carrusel de la Contratación, fue trasladado de prisión a la de Acacías, Meta, un centro penitenciario de mediana seguridad, luego de que su defensa presentara una solicitud de prisión domiciliaria, el pasado mes de febrero.
Moreno Rojas permanecía en la cárcel La Picota en una celda designada para funcionarios públicos, por lo que el cambio de prisión se dio tras una orden judicial.
Documentos oficiales muestran que en febrero de este año su abogado pidió prisión domiciliaria, pero por una decisión de un tribunal de ejecución de penas en Bogotá, el exsenador fue llevado al nuevo centro de reclusión del Inpec, en donde participaría de proyectos como agricultura para conseguir beneficios.
Moreno Rojas fue trasladado al Meta para que siga cumpliendo con su condena, la cual fue impuesta por la Corte Suprema de Justicia el pasado mes de agosto, tras sentenciarlo a 13 años y nueve meses por el escándalo del Carrusel de la Contratación en Bogotá, en el cual también estuvo involucrado su fallecido hermano, el exalcalde Samuel Moreno.
La Corte Suprema condena a Iván Moreno por Carrusel de Ambulancias
En una decisión de más de 300 páginas, la Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia condenó, en abril de 2023, a cinco años y siete meses de prisión al exsenador Iván Moreno Rojas por el escándalo de corrupción conocido como el Carrusel de las Ambulancias.
“Decide la realización de acciones encaminadas a la manipulación del pliego de condiciones de la licitación y la inclusión de determinadas condiciones, mediante las cuales se garantizó que el contrato le fuera adjudicado al oferente propuesto por él; para la época de los hechos, concejal del distrito capital, Hipólito Moreno, como a la postre ocurrió, lo que le permitió recibir a Moreno una suma de dinero correspondiente al 50 % del total de la coima pactada”, advierte la Corte en la extensa decisión.
En este caso, tal como advirtió la Procuraduría, los pliegos de condiciones se elaboraron con determinadas especificaciones que permitieron el direccionamiento a un proponente ganador, acordándose la distribución de coimas del 9 % del valor de un contrato “con destino a los hermanos Moreno Rojas, al contralor distrital Miguel Ángel Moralesrussi, al personero distrital Francisco Rojas Birry; los concejales Hipólito Moreno, Ómar Mejía Báez, Wilson Duarte, como también al secretario y subsecretario distrital de Salud Héctor Zambrano y Juan Varela”.
“Contra la tesis del dominio de la actividad criminal por parte del enjuiciado en la sentencia se deja ver el papel de Tapia Aldana dentro de la estructura, quien más que ser un mero intermediario al servicio de Néstor Iván, colaboró en la campaña de Samuel Moreno, tenía injerencia en la contratación y también resultaba beneficiario de las comisiones que se pactaran como consecuencia de adjudicaciones irregulares de contratos estatales”, señala otro aparte.
La sala mayoritaria también sostiene que el enjuiciado, en este caso Iván Moreno, “ejerció de manera dominante el control de la actividad criminal, lo que da a entender que como líder tenía dominio sobre la organización criminal; no obstante, imputar responsabilidad a partir de tal planteamiento llevaría más a los terrenos de la autoría mediata por dominio de organización, figura que al margen de su compatibilidad o no con el ordenamiento jurídico colombiano, no fue la endilgada al procesado”.