El general Jhon Rojas, quien fue retirado del Ejército luego que, según afirma, le hicieran un burdo montaje, seguimientos y presiones que incluso afectaron a su familia; hechos por los cuales, sin ambages, señala como autor al actual comandante del Ejército, el también general Luis Mauricio Ospina, está dando su propia batalla, esta vez en la arena judicial y esta podría incluso llevarlo de regreso a las filas.
Así lo confirmó su abogado Víctor Mosquera, quien justamente reclamando por el montaje, que aseguran ya está comprobado, “hemos convocado por medio de la Procuraduría a una audiencia de conciliación al Ejército Nacional, Ministerio de Defensa y Presidencia de la República, audiencia que se llevará a cabo el día de hoy, viernes 12 de abril de 2024 y, en la cual, se pretende llegar a un acuerdo sobre la permanencia del General en la institución dejando de lado, incluso pretensiones económicas indemnizatorias”.
Tal como lo plantea el abogado Mosquera, el asunto no es de plata, es de honor, de limpiar su nombre y devolverle la tranquilidad a su familia. Tranquilidad que asegura se la quito el ya emproblemado comandante del Ejército, Luis Mauricio Ospina.
Mosquera en su comunicado da pistas del burdo montaje que habrían realizado contra el general Rojas, y que está relacionado con su labor como comandante en la conflictiva zona del Cauca, en donde dio durísimos golpes a los criminales, pero al mismo tiempo realizaba intervención social en favor de los pobladores y de quienes optaban por dejar las armas, lo que le valió el remoquete de “el general de la Paz”, el mismo que usaron para enlodarlo.
El abogado afirma que tomó el caso y busca “obtener su reintegro inmediato al Ejército Nacional de Colombia en calidad de Mayor General, para que este pueda seguir aportando a la construcción de un país en paz, mediante su metodología de acción integral. Enfocada en proyectos sociales, así como la integración de los diferentes exactores del conflicto armado con los gremios y empresarios del país para su reinserción a la sociedad”.
En entrevista con SEMANA, el general Rojas, luego de su salida, denunció todo lo que había ocurrido en su caso y explicó la responsabilidad del comandante del Ejército, general Luis Mauricio Ospina, y otros altos mandos de la institución para sacarlo por la puerta de atrás.
“¿Cómo es posible que el comandante del Comando Específico del Cauca, el general Federico Mejía, y el comandante de la Tercera División, el general Raúl Vargas, uno en Popayán y otro en Miranda, Cauca, elaboren un informe el mismo 22 de septiembre y se lo envíen al inspector del Ejército? Él debe verificar cuál es el grado de responsabilidades en los niveles de mando, pero no lo hizo. Se lo remitió al comandante del Ejército, el general Luis Mauricio Ospina. Y él, el mismo 22 de septiembre, le hizo un informe al general Helder Giraldo, comandante de las Fuerzas Militares, quien finalmente lo envió a la Fiscalía”, afirmó el general en retiro en entrevista con SEMANA.
Y agregó que “algunos de esos informes hablan de lo mismo, es decir, como si hubieran estado todos reunidos. Y al día siguiente me dijeron que no asciendo a mayor general, y a los tres días divulgaron un comunicado de prensa sin ni siquiera preguntarme si eso era cierto. Aquí le hago un llamado de atención al inspector: ¿por qué no investigó? Yo tenía bajo mi mando a generales, coroneles, tenientes coroneles, capitanes, mayores, ¿pero por qué todo contra el general Rojas?”.
Y fue contundente, como se mantiene hasta el momento en señalar al comandante del Ejército, general Luis Mauricio Ospina, “El comandante del Ejército, el general Luis Mauricio Ospina, porque él elaboró el informe, firmó lo que es un montaje. Y lo que me causó extrañeza fue que él no hubiera dedicado un minuto a analizar que eso era un montaje, conociendo de años anteriores quién era el general Rojas. Él sabe las responsabilidades de un general. Incluso, hay apartes de esos informes que son chismes, cosas que ni siquiera tienen un valor probatorio. Todo con el ánimo de sacarme del juego a escondidas, de sacar a este soldado. Vicky, ellos tenían la potestad de decirme: “No va más”, y yo pido mi retiro”.
El tema de fondo era que, por la estructura piramidal de las Fuerzas Militares, solo se puede ascender a la cúpula con la salida de otros uniformados y en el caso de Rojas se había convertido, al parecer, en un obstáculo para algunos de los miembros de la actual cúpula. Por lo que habría usado justamente sus logros y el remoquete de “general de la paz”, para sacarlo del camino.
No hubo misericordia, no solo la empredieron contra él y le empañaron su carrera, le hicieron seguimientos ilegales que involucraron incluso a familiares en sus propias casas, un asunto tan complejo que incluso señaló que su hija resultó tan afectada que hasta perdió un hijo. Aún así, sigue dando batalla y está pidiendo pista, por vías jurídicas, para volver a las filas.