El presidente Iván Duque firmó el acto administrativo para el retorno de la aspersión aérea con glifosato, dando un paso más hacia esta polémica forma de erradicación, que se ha convertido en un asunto político, dividiendo al país desde hace años. El contexto ha servido para que algunos detractores le recuerden al ministro de Salud, Fernando Ruiz, lo que él mismo dijo sobre el uso del pesticida en el pasado.

Justamente, fue la actual cara de la salud la que hizo que se frenara esta práctica en 2015, cuando el Gobierno de Juan Manuel Santos, atendiendo un fallo de la Corte Constitucional para aplicar el principio de precaución y por un concepto de la Organización Mundial de la Salud, tomó la decisión de no utilizar más el pesticida.

Fernando Ruiz. Ministro de Salud. Bogotá Febrero 10 de 2020. Foto: Juan Carlos Sierra-Revista Dinero. | Foto: Juan Carlos Sierra

Específicamente, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), adscrita a la Organización Mundial de la Salud (OMS), tras revisar exhaustivamente todos los estudios disponibles en el mundo, advirtió en ese entonces sobre la existencia de pruebas de que el glifosato puede causar cáncer en animales y potencialmente en los humanos.

En ese entonces, el ministro de Salud era Alejandro Gaviria y el viceministro era Fernando Ruiz, actual jefe de la cartera, quienes se oponían al uso del herbicida para acabar con los cultivos de coca, por razones de salud.

Alejandro Gaviria ha despertado un gran entusiasmo por su posible candidatura presidencial. | Foto: Leon Dario Pelaez

Al ministro Ruiz le cobran sus declaraciones y posiciones públicas en el pasado en contra del herbicida. En mayo de 2015 escribió en Twitter: “Consejo Nacional de Estupefacientes dice no a la aspersión aérea con Glifosato.”

Ese mismo mes escribió un trino que ha tomado fuerza en los últimos días, pues señalaba en 2015 que a nivel internacional aplaudían la decisión de Colombia por eliminar la aspersión aérea con glifosato.

Ese mismo año, en una entrevista con el periodista Darío Arizmendi, para Caracol Internacional, también se refirió al tema: “Desde el punto de vista de salud, el imponderable que existe aquí es el daño a largo plazo. El principal cáncer que se le atribuye al glifosato es el de linfoma no hodgkin, un tipo de cáncer en el órgano linfático, que puede desarrollarse 15 o 20 años después de la exposición (...) Y ante un hecho sobreviniente tan importante como una clasificación por la autoridad sanitaria internacional de este producto, como un producto probablemente cancerígeno, necesariamente nos lleva a actuar”.

Recientemente, en una entrevista con la W Radio, el actual ministro de Duque explicó que en este momento no hay una aprobación de la aspersión, sino que el decreto firmado por el mandatario es un paso más. De cualquier forma, la Corte Constitucional también exigió conceptos ambientales y de salud, entre otros, para que la decisión final la tome el Consejo Nacional de Estupefacientes.

“Yo no me puedo pronunciar, porque tengo una declaratoria de impedimento que está radicada ante la secretaría jurídica de la Presidencia de la República, y todavía no se ha tomado una determinación al respecto por parte del Consejo de ministros, entonces estaré pendiente de eso para poder hacer cualquier pronunciamiento”, señaló en la entrevista.

Además, cuando le preguntaron si podría continuar en un Gobierno que utilice ese químico, aseguró que no hay posiciones personales al respecto y que las suyas siempre son técnicas. “De acuerdo con la evidencia científica y de acuerdo con las decisiones y el marco jurídico que existe en su momento”, sostuvo.

Por ahora, tampoco se conoce el análisis del impacto en la salud que contrató el Gobierno con una universidad y que fue evaluado por el Instituto Nacional de Salud.