Luego de que el gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, manifestara sus intenciones de participar en las mesas de diálogos con las disidencias de las Farc, el mandatario de los sucreños, Héctor Olimpo Espinosa, también se sumó a la solicitudes y le pidió al Gobierno nacional que lo tenga en cuenta para integrar los procesos de paz que se adelanten con el Clan del Golfo.
“Como víctimas que somos en el departamento de Sucre de las acciones del denominado Clan del Golfo contra la indefensa población civil, y también de sus acciones de extorsión, intimidaciones y amenazas al proceso electoral de octubre en gran parte de nuestros municipios, nos solidarizamos con la petición de nuestro colega Juan Guillermo Zuluaga, gobernador del Meta, de ser parte integral de la mesa de negociación que se viene dando con las disidencias de las Farc en esa región del país”, dijo Espinosa.
Y agregó: “En segundo término, también le solicito al Gobierno nacional que se nos incluya en los procesos de fase exploratoria, construcción de confianza, canal humanitario y conversación socio jurídica, que sabemos se vienen explorando con el Clan del Golfo”.
Para Héctor Olimpo Espinosa, Sucre es uno de los departamentos más afectados del país por el accionar del Clan del Golfo y, por ello, merece participar en los diálogos que se adelanten con dicha estructura criminal.
“Lo anterior, en razón a que siendo nuestro territorio sucreño uno de los principales dolientes de las acciones criminales, delictivas e ilegales de esa organización, tenemos el legítimo derecho a formar parte de próximas negociaciones que se pudieran dar con ese grupo, en el marco legal y constitucional de la paz total”, sostuvo el gobernador.
“Por último, consideramos también que deben ser incluidos en mesas de negociación y acercamientos todos los mandatarios de los departamentos que son víctimas de las amenazas y acciones de todos estos grupos al margen de la ley, con quienes el gobierno del presidente Petro busca avanzar en su iniciativa de paz total”, finalizó el pronunciamiento del mandatario.
A pesar de que las acciones criminales del Clan del Golfo llevaron al rompimiento del cese al fuego con esa organización, el pasado 19 de marzo, el Gobierno nacional le vuelve a tender la mano a este grupo armado ilegal.
Así lo reconoció la Oficina del Alto Comisionado para la Paz en un documento enviado al Congreso de la República.
En ese texto, la entidad estatal reconoce que, “a pesar del rompimiento del cese al fuego, la Oficina del Alto Comisionado para la Paz ha mantenido conversaciones con dos facilitadores de este grupo armado, con el objetivo de mantener un mínimo de relacionamiento y comunicación con esta estructura”.
De acuerdo con la oficina dirigida por el comisionado de paz, Danilo Rueda, la idea de estas conversaciones es buscar la posibilidad de tener un nuevo cese al fuego con esta organización ilegal.
Con estos acercamientos se busca “identificar las acciones que permitan avanzar en la recuperación de un espacio de diálogo bajo un cese al fuego bilateral”.
Igualmente, la entidad reconoce que ha “sostenido algunas conversaciones con el apoyo y acompañamiento de algunas embajadas. Como resultado, se avanza en el acuerdo de acciones de carácter humanitario que buscan aliviar los efectos de la guerra en los territorios en los que este grupo armado tiene injerencia”.
En la comunicación enviada al Congreso, el Gobierno aclara que actualmente no hay ningún proceso de paz con el Clan del Golfo, aunque reconoce que, “en caso de habilitarse espacios, sería sólo para asuntos de sujeción a un mecanismo judicial que permita la dejación colectiva de armas”.
“El Gobierno nacional no tiene ninguna agenda de negociación ni existe negociación, los acercamientos son en asuntos humanitarios por el respeto a la vida, esto es lo único que existe; en caso de habilitarse espacios en este sentido, sería solo para asuntos de sujeción a un mecanismo judicial que permita la dejación colectiva de armas, transición de derechos con garantías y transformaciones territoriales, pero aún no hay avance en esta materia”, reza el documento.
El 19 de marzo pasado, Petro ordenó suspender el cese al fuego con el Clan del Golfo o Autodefensas Gaitanistas de Colombia, debido a que el grupo armado ilegal fue responsabilizado por el ataque con fusil a la fuerza policial en el Bajo Cauca antioqueño durante un paro minero.