Tras el malestar que generó en el Gobierno nacional el más reciente informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), en compañía del Programa Mundial de Alimentos (PMA), en el cual se advirtió que Colombia se encuentra en la lista de países en riesgo de hambre aguda en 2022, el representante de la FAO en Colombia, Alan Jorge Bojanic, habló sobre lo sucedido.
Bojanic, quien hizo presencia en la declaración que dio la canciller y vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, fue enfático en señalar que reconocía los “grandes esfuerzos” que está haciendo Colombia en materia de seguridad alimentaria.
“Sería injusto no reconocer el gran esfuerzo con el tema de seguridad alimentaria, sería injusto no reconocer los recursos que han sido comprometidos para ello (seguridad alimentaria)”, sostuvo Alan Jorge Bojanic.
Agregó en su intervención: “Lamentablemente el informe no refleja esos esfuerzos, debería reflejar las capacidades, porque una cosa es tener un problema de inseguridad aguda de un grupo poblacional y otra cosa es pensar que el país esté afectado por una situación de deterioro”.
Dejó claro: “Haber puesto un mapa (en) que se coloreaba todo el país de un mismo color que otros países es algo que estamos trabajando. Yo he hablado con mi sede para que se reconsidere y trabaje mejor este tema de reflejar mejor la situación”.
También aseguró: “La intención de nosotros era poder atraer recursos para, justamente, apoyar el tema de la alimentación de los migrantes, pero la forma en que fue presentado no fue la mejor y, por lo tanto, estamos en la situación que estamos; de ninguna manera se esta hablando de la seguridad alimentaria nacional”.
La postura del gobierno Duque la entregó la vicepresidenta y canciller Marta Lucía Ramírez, quien fue enfática en señalar que se rechazaba el informe de la FAO, al indicar que el país cuenta con programas sociales que buscan preservar la seguridad alimentaria.
“La Cancillería, en nombre del Gobierno nacional, rechaza el informe ‘Hunger Hotspots FAO-WFP early warnings on acute food insecurity’, de la @FAO y @PMA, que menciona la situación de seguridad alimentaria colombiana al no corresponder a la realidad del país”, dice uno de los mensajes que escribió la Cancillería colombiana.
En otro trino, el Ministerio de Relaciones Exteriores aseguró: “Colombia cuenta con programas sociales que buscan preservar la seguridad alimentaria de sus habitantes, como Ingreso Solidario, Jóvenes en Acción, Familias en Acción, Adulto Mayor y devolución del IVA, entre otros”.
“Cuenta con una política agrícola y de desarrollo rural con instrumentos de financiación, asistencia técnica y desarrollo de cadenas de valor agregado que se han fortalecido durante este Gobierno, para asegurar el aumento en la producción de alimentos logrando resultados positivos”, publicó la entidad.
No obstante, Ramírez fue enfática en indicar que dicha publicación “carece del soporte fáctico, definición metodológica y claridad en las fuentes que le den validez y credibilidad. Los contenidos en los que se menciona la situación de seguridad alimentaria en la República de Colombia no corresponden a la realidad nacional”, todavía menos cuando se contrasta con el estado de cosas en la región.
Recalcó la alta funcionaria: “Es francamente curioso que nuestro país aparezca relacionado en ese informe sobre problemas agudos de inseguridad alimentaria, en claro contraste con el silencio respecto de otros países de la región de los cuales se conoce suficientemente su precariedad institucional, la falta de estímulo a la inversión privada de industrias de alimentos, la falta de transparencia sobre las cifras y, curiosamente, ninguno de esos países aparece señalado en el reporte”.
El informe de la FAO explica que Colombia es, junto con Honduras y Haití, de los únicos países de América que podrían experimentar una situación de hambre extrema este año.
“Es probable que la inseguridad alimentaria se deteriore aún más en Colombia en los próximos meses debido a una combinación de inestabilidad política, desafíos económicos y el impacto continuo de la crisis migratoria regional amplificada por el desplazamiento interno”, aseguró el documento en el apartado que habla específicamente de Colombia.