Desde que era un adolescente, Martin von Hildebrand ha estado interesado por defender la diversidad de los pueblos indígenas y su derecho a existir y ser reconocidos en una sociedad donde impera la lógica occidental. Lleva 40 años recorriendo los ríos y selvas de la Amazonia, región que conoce palmo a palmo.Von Hildebrand nació en Estados Unidos en 1943 y llegó a Colombia en 1948. Estudió Antropología en la Universidad de los Andes y luego en Irlanda (donde terminó la carrera) y es doctor en Etnología de la Universidad de Paris VII. Regresó a Colombia en 1972 y a finales de ese año se conectó con la Amazonia, como funcionario del Instituto Colombiano de Antropología. Como director nacional de Asuntos Indígenas, contribuyó a que el gobierno Barco declarara el reconocimiento de la propiedad colectiva de los indígenas sobre 25 millones de hectáreas del Amazonas.  A partir de 1990 desde la Fundación Gaia Amazonas y el programa Coama (Consolidación Amazónica), ha dedicado su vida a defender los derechos de los pueblos  indígenas en general y del Amazonas en particular, a salvaguardar la diversidad cultural y de los ecosistemas de una selva considerada como la gran reserva de oxígeno de la humanidad. Entre sus logros se destacan la creación de una plataforma interinstitucional entre las autoridades indígenas del Amazonas y los gobiernos locales y regionales, a través de la cual  27.000 indígenas han logrado acceso a salud y educación intercultural y se han impulsado nuevos modelos de conservación ambiental basados en conocimientos tradicionales. Además, en los últimos diez años ha liderado un proceso de gobernanza ambiental de las culturas indígenas con Brasil y Venezuela. Su labor ha sido reconocida con premios como el Right Livelihood Award (Premio Nobel Alternativo), en Suecia; el Premio Nacional Ambiental, en Colombia; The Order of the Golden Ark en Países Bajos; el Premio Skoll en Estados Unidos; y la Fundación Schwab, del Foro Económico Mundial, lo nombró Emprendedor Social Latinoamericano.