El coronel Óscar Dávila murió en la tarde del pasado viernes, 9 de junio, en la calle 22 bis n.º 48-40, en el sector de Teusaquillo, Bogotá. En ese momento, según las primeras versiones, iba acompañado de su escolta, se detuvo en el carro y le pidió a su hombre de seguridad que le comprara una botella de agua. Al regresar, se encontró con el oficial sin vida por impacto de bala. Las primeras versiones hablan de que el coronel se habría quitado la vida.
Dávila era nada menos que el jefe de la sala de anticipación, encargada de la seguridad del presidente Gustavo Petro, y habría sido quien, por órdenes superiores, debía recuperar el dinero de Sarabia a como diera lugar. Dispuso usar el polígrafo con la niñera Marelbys para determinar si ella se lo había robado.
“El teniente coronel de la Policía Óscar Dávila, adscrito a la seguridad de la Presidencia de la República, ha muerto por suicidio. Cerca de su casa mandó a su conductor por una botella de agua, este dejó su pistola en el asiento y cuando regresó, delante de él se suicidó con un disparo en la sien con la pistola que había dejado”, indicó Petro.
Sin embargo, todo cambió luego que un testigo hablara en exclusiva con Semana y revelara información que podría contradecir lo dicho por el presidente Petro y las causas de la muerte del coronel.
Tan pronto estalló el escándalo de la exniñera Marelbys Meza, cuando la Fiscalía destapó las chuzadas, el coronel Dávila empezó a tener angustias.
“A él ya lo empiezan a presionar en que hay que mantenerse en la versión. Él tenía la presión de todo lo que había hecho. El temor era a que las personas que sabían en algún momento lo nombraran, por ejemplo, un patrullero, un intendente o cualquiera de los que está declarando. Todo iba a llegar a él y, desde arriba, ya lo estaban dejando completamente solo”, dijo una fuente a la que tuvo acceso SEMANA y que contó detalles que comprometen directamente al Gobierno del presidente Gustavo Petro. La identidad de la fuente se mantendrá en confidencialidad para proteger su vida.
La misma fuente aseguró que el primer pecado fue que Dávila participó en el polígrafo de la niñera Marelbys Meza sin ser una funcionaria y reconoció que el coronel estaba preocupado por lo que estaba ocurriendo.
Ante las revelaciones del testigo, el presidente Petro nuevamente se volvió a pronunciar en Twitter, cuestionando las labores de la prensa e insistiendo en que el coronel sí se suicidó.
“Algunos sectores de la prensa han insinuado que el coronel Dávila no se suicidó; si se acercaran a averiguar las causas de su suicidio, y ya será la labor de la justicia, se encontrarán con un espejo y la imagen reflejada les haría gritar de espanto”, fue el trino del mandatario en la madrugada el jueves 15 de junio.
El testimonio de la fuente destapó otro escándalo en el Gobierno de Petro y ahora quedan más preguntas que respuestas ante la muerte del coronel Dávila.
Escuche la opinión de María Isabel Rueda sobre el explosivo testimonio contra Gustavo Petro:
Urgente | “La plata era de Petro, eran cinco maletas y 3.000 millones de pesos”: explosivo relato de testigo que habló con el fallecido coronel Óscar Dávila en medio del escándalo
Un testigo que sostuvo varias conversaciones con el fallecido coronel Óscar Dávila, coordinador de Protección Anticipativa de la Presidencia, decidió entregarle en reserva a SEMANA un explosivo testimonio que salpica directamente al presidente Gustavo Petro. La identidad de la fuente se mantendrá en confidencialidad para proteger su vida.
Según su relato, la clave del escándalo está en el dinero perdido en la casa de Laura Sarabia, exjefe de gabinete. “La plata era de Petro, eran cinco maletas y 3.000 millones de pesos”, dijo.
“Dávila me dijo que Petro mandó a Laura a guardarle la plata en el apartamento, ese dinero se perdió, entonces necesitaban que apareciera antes de tener que informarle al presidente que se había perdido”, agregó.
Por esa razón, según la fuente, se desató una operación ilegal con el fin de recuperar los 3.000 millones de pesos a como diera lugar. En estos hechos, de acuerdo con el testimonio, participó directamente el coronel Dávila, pero no habría actuado solo.
“A él (el coronel Dávila) lo contacta el coronel (Carlos) Feria (jefe de Casa Militar de la Presidencia) porque, cuando se sabe lo del monto del dinero, Laura (Sarabia) llama a Feria, y Feria contacta a Óscar (Dávila) y él empieza a hacer todas las actividades. Lo primero que hacen es empezar a hacer las pruebas de poligrafía, pero no se lo hacen a la empleada sino a la teniente”, dijo la fuente, en referencia a la teniente Laura Luna.
Además, indicó que le hicieron polígrafo a todo el esquema de seguridad de Sarabia.
“Entonces a la primera que tratan de culpar es a ella (a la teniente), le hacen la prueba de polígrafo, presenta el polígrafo, no tiene ningún problema, en la prueba la presionan y dicen que ella es la que tiene que responder y ella dice no va a responder por nada de eso. Ahí empieza a hablarse ya de un monto de 3.000 millones de pesos”, sostuvo la fuente.
Luego se tomó la decisión de someter al polígrafo a Marelbys Meza, la exniñera del hijo de Sarabia.
“Ahí ya dicen que la empleada es la culpable, lo que él (Dávila) nos dice es que de eso se recuperaron 268 millones de pesos. Y los entrega el esposo o la pareja permanente o el compañero de la empleada del servicio. A él lo cogen en el ámbito de la Policía, dice que lo levantan, lo aprietan, todo eso, y él entrega ese dinero”, relató la fuente.
“Había que recuperar un dinero que se había perdido y tocaba hacerlo y la señora (Marelbys) accedió voluntariamente. Se hizo con recursos públicos, con una persona que no era funcionaria, ese fue el primer error”. Frente a los insultos a la exniñera en el polígrafo, dijo: “Sí, eso hace parte normal de la presión que se ejerce para sacarle la verdad al máximo. Si ella pierde el polígrafo, eso se reafirma más y se genera ese tipo de presión”.
Los hechos habrían ido más allá. Según el testigo, el coronel Dávila le contó que él mismo le entregó personalmente a Sarabia, en sus manos, una maleta con los 268 millones de pesos recuperados.
“El coronel Feria sabía todo y, por obvias razones, Laura Sarabia, porque los 268 millones de pesos se los entregó (Dávila) personalmente a ella”, agregó la fuente.
Una de las pistas que el testigo entregó en su relato estaría en las cámaras de seguridad del edificio donde vive Sarabia, pues dijo que el coronel Dávila le aseguró en su momento que todo habría quedado registrado en video. “De cómo ingresaban y salían las maletas”, aseguró.
El testigo revela que el coronel Dávila estaba preocupado. “La angustia que él tenía era que ya se estaban empezando a saber cositas y todo iba a empezar a desencadenarse directamente sobre él. Finalmente el que realizó la mayoría de las cosas fue él, pero a él no lo contactaron directamente, lo contacta el coronel Feria”, contó la fuente.