Recientemente se conoció de la liberación de la monja colombiana Gloria Narváez, quien estuvo por más de cuatro años secuestrada en Malí, África. SEMANA habló con el cerebro de la delegación colombiana que trató de buscar su liberación.
Se trata del coronel Gustavo Camargo, quien encabezó el equipo de inteligencia que viajó a África para tratar de negociar con los secuestradores la libertad de la religiosa.
Dijo el oficial que “lo más importante era que teníamos claro el contexto de lo que estaba ocurriendo, era un país adverso por muchos problemas de seguridad y la amenaza latente de un grupo terrorista como Al Qaeda. La amenaza era que la vida de la hermana podría correr peligro por la situación del país o por el grupo como tal o la inclemencia del clima”.
Añadió que “desde que llegamos a Malí, África, la prioridad era establecer cómo estaba y dónde estaba. Por información de inteligencia logramos establecer que se encontraba en la frontera de Malí y sobre eso se basó nuestra investigación y la gestión”.
Así mismo, indicó el oficial porque decidieron mantener a la hermana Narváez secuestrada. “El grupo terrorista que la tenía es el Frente de Liberación. Ellos tenían ocho secuestrados y era un negocio, tenían otros extranjeros que habían pagado rescate por ellos, una vez la tienen, se enfocan en la causa del secuestro, en la religión. Decían que la hermana estaba difundiendo su religión ante los musulmanes, pero eso era falso porque ella estaba haciendo era una misión humanitaria”.
Es de recordar que la liberación de la monja colombiana se dio el pasado el sábado 9 de octubre, después de haber sido secuestrada por yihadistas en 2017, en Malí. La información que se presentó para la época de los hechos señalaba que su privación de la libertad se produjo en la localidad de Koutiala, 400 kilómetros al este de la capital.
“Yo agradezco primero a Dios, que es la luz y la paz. Aprendí muchísimo del grupo. Gracias a Dios, a las autoridades de Malí, al presidente, por los esfuerzos hechos para liberarnos. Dios los bendiga, Dios bendiga a Malí. Gracias”, dijo la religiosa.
La noticia sobre la liberación de la colombiana fue anunciada por el propio presidente de Malí, Assimi Goita. “Este día 9 de octubre de la religiosa colombiana Gloria Narváez. Fue secuestrada el 7 de febrero de 2017 en Karangasso, en el círculo de Koutiala en la frontera entre Malí y Burkina Faso. La Presidencia de Malí saluda el coraje y la valentía de la hermana”, dijo el gobernante.
Añadió la Presidencia de Malí en sus redes sociales que “fue secuestrada el 7 de febrero de 2017 en Karangasso, en el círculo de Koutiala, en la frontera entre Malí y Burkina Faso. La Presidencia de Malí saluda el valor y la valentía de la hermana. Esta liberación es el resultado de 4 años y 8 meses de esfuerzos conjuntos de varios servicios de inteligencia. El presidente aprovecha esta oportunidad para dejar claro al pueblo en Malí y a la comunidad internacional que todavía se están haciendo esfuerzos para liberar a todas las personas, malienses como extranjeros, retenidas en el territorio de Malí. El presidente de transición felicita una vez más a las Fuerzas de Defensa y Seguridad y a los Servicios de Información”.