El domingo 29 de mayo, los colombianos mayores de edad, con cédula de ciudadanía, ejercieron su derecho al voto para las elecciones presidenciales de la primera vuelta en Colombia. A pesar de la sorpresa política de Rodolfo Hernández, al ser el segundo candidato con más votos, el primer puesto lo obtuvo Gustavo Petro, representante del Pacto Histórico.

El economista de 62 años logró acaparar la confianza de más de 8 millones de colombianos, pero luego de ello las polémicas alrededor de su trayectoria no se hicieron esperar.

Hasta el momento han sido varias las décadas en las que Petro ha estado activo en la vida política y se ha desempeñado en distintos cargos, entre esos, entre 2012 y 2015 fue alcalde de Bogotá, época para la que fue criticado por varias razones.

El líder y fundador del movimiento de la Colombia Humana, en su momento, fue suspendido, pero la Corte Interamericana de Derechos Humanos invalidó esa decisión y fue así como logró la continuidad de su mandato.

Pero el proceso en la política de Gustavo Petro ha sido extenso: fue concejal de Zipaquirá, representante a la Cámara por Cundinamarca, luego, senador y su ideología está centrada en la izquierda progresista y miles de colombianos recuerdan la época en la que fue militante de M-19.

Sin embargo, hay tres puntos por los que el candidato del Pacto Histórico suele ser criticado, sobre todo en esta etapa en la que busca ser el próximo Presidente de la República.

Prolongación de contratos de TransMilenio

Una de las razones por las que Petro ha protagonizado varias polémicas está relacionada con los contratos del medio masivo de transporte público de la capital del país: el TransMilenio.

En un principio se tenía en mente que el economista no extendería los contratos para el sostenimiento de la organización, pero al final sí resultó haciéndolo.

Para esa época, el exalcalde de Bogotá bajó las tarifas del sistema un 13 %, hecho por el que la Contraloría asumió que la medida era ilegal y fue así como lo acusaron de la responsabilidad fiscal del caso, pero la Corte Constitucional pidió retirar esta acción durante su mandato.

Aprobación de POT por decreto

Otro de las variables por las que el economista suele ser mencionado y criticado es por aprobar el POT mediante un decreto, a pesar del desacuerdo del Consejo de esta ciudad.

“El alcalde no puede adoptar el proyecto por decreto, pues estaría contrariando y desconociendo las facultades constitucionales y legales del Concejo, antes anotadas, para decidir la suerte de los proyectos de acuerdo”, fueron las palabras de los representantes del Consejo de la capital en 2013.

Basuras en Bogotá

Quizá este es uno de los ítems que más se menciona en varios escenarios políticos y en redes sociales. Gustavo Petro tuvo la iniciativa de incorporar una transición para que el servicio de aseo general en Bogotá volviera a la administración distrital; todo esto con el objetivo de establecer un programa en el que el foco poblacional prioritario fuera el colectivo de recicladores.

Para que el proyecto tuviera cabida, se planeó prorrogar los contratos con operadores privados por varios meses, esto iba de la mano con el diseño de una organización de carácter público que debía iniciar labores el 18 de diciembre del 2012, pero sus cálculos no fueron los adecuados y, al contrario, agregaron cláusulas de urgencia a la contratación de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB).

En consecuencia, la idea que llevaba por nombre “Basura Cero” terminó con baja recepción y entre el 18 y el 21 de diciembre (del año en mención) en Bogotá los residuos de basura no se recogieron en varios puntos, esto hizo que las autoridades y los contradictores del Concejo de la ciudad lo denunciaran.