A través de su cuenta de Twitter, el candidato presidencial del Pacto Histórico, Gustavo Petro, manifestó su inconformismo ante la no contratación de una auditoría técnica para las elecciones de este domingo 29 de mayo.

“No permitieron la auditoria técnica el software de Thomas & Gregg que hace preconteo y escrutinio”, dijo el candidato.

Además, aseguró que esta era “la mayor garantía” para las elecciones de este domingo, debido a lo ocurrido en las votaciones parlamentarias donde el mismo candidato ha dicho que se perdieron más de un millón de votos.

En esto coincide el senador del Pacto Histórico Armando Benedetti, quien afirmó durante el análisis previo a las elecciones de SEMANA que hay “cero confianza” en la gestión de la Registraduría para los comicios de este domingo.

“No se pudo contratar la auditoria internacional, una auditoria que debe empezar con más de un mes de anticipación para poder verificar el proceso”, afirmó el senador electo.

Igualmente, afirmó que Thomas & Gregg se equivocó porque no hubo forma de que las campañas tuvieran acceso a verificar la información: “Nos vamos a una elección donde no sabemos qué hace Thomas & Gregg, eso en cualquier parte del mundo es violencia, porque nadie va a saber lo que está pasando”.

En este sentido, admitió que no hay confianza por parte del Pacto Histórico frente a las elecciones al no haber una visión internacional.

En su cuenta de Twitter, además, admitió que: “En este momento no siento que @petrogustavo tenga garantías ante la Registraduría para las elecciones de mañana. No hay auditoría internacional ni tampoco tenemos certeza que se hayan corregido los errores del pasado en el software de T&G”.

Otros sectores políticos de corrientes ideológicas opuestas al Pacto Histórico también admitieron tener dudas frente a las elecciones y al trabajo de la Registraduría.

El senador de la Alianza Verde Antonio Sanguino afirmó que no es que no se haya podido contratar la auditoria internacional, es que no “se quiso” y eso genera serias dudas frente a la confiabilidad del proceso electoral.

“Esas actuaciones son sospechosas porque hay una resistencia enorme a revisar los software, algo raro ocurre y hay gato encerrado en la organización electoral”, aseguró Sanguino.

Además, aseveró que no hay un respeto por la verdad electoral “tanto que hay un desfase de más de un millón de votos de las elecciones pasadas y no se ha querido contratar una auditoría forense para verificar lo ocurrido en marzo ni una preventiva para las de este domingo”,

De hecho, añadió que si bien el Consejo Nacional Electoral aprobó la auditoria, la Registraduría y el Gobierno ‘dilataron’ los tiempos para que no se pudiera contratar: “Esto deja muchas suspicacias e interrogantes, no creo que haya alguien tan temerario que ponga en riesgo la estabilidad democrática”.

Por su parte, Miguel Uribe, del Partido Centro Democrático, admitió que hay una preocupación frente a la falta de confianza en las instituciones y que hay más “cuestionamientos que respuestas” frente a la no contratación de la auditoría internacional.

“No es en vano que los diferentes sectores sintamos desconfianza en las elecciones, por eso debemos cuidar los votos y que los testigos hagan una buena tarea en esta y en la segunda vuelta”, añadió Uribe.

Finalmente, el senador Sergio Araujo afirmó que hay una desconfianza en la Registraduría por temas que han pasado no solo ahora sino en las elecciones anteriores, pero afirmó que es increíble que las denuncias de los 700.000 votos perdidos en los sufragios parlamentarios solo beneficien al Pacto Histórico y que por ello hay que ver más a fondo lo que está ocurriendo para evitar fraudes electorales.