En las últimas horas, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) emitió un comunicado en el que informó su decisión de levantar el paro armado que impuso en la región del río San Juan, departamento del Chocó, desde el pasado 7 de noviembre.

De acuerdo con el anuncio, el conflicto finalizará en la madrugada de este 16 de noviembre, lo que significa el regreso de la libre movilidad de varias comunidades ribereñas de la zona que se encontraban incomunicadas, unas 45.000 personas, según cálculos de la Defensoría del Pueblo.

“A partir de las 6:00 a. m. del día 16 de noviembre de 2024, damos por finalizado el paro armado en la subregión del San Juan”, señaló el Frente de Guerra Occidental de esa guerrilla en la misiva.

Además, señaló que la medida buscaba reafirmar su control territorial y advertir sobre la presencia de lo que denomina “fuerzas de ocupación”, haciendo alusión a grupos paramilitares y a las fuerzas armadas del Estado.

En el mismo documento, la guerrilla del ELN agregó un importante llamado a los habitantes de la región para que eviten movilizarse en las áreas de alta conflictividad en horas de la noche, debido a que sus unidades estarán en constante alerta en esta parte del departamento.

Las comunidades de la región se encontraban incomunicadas desde hace siete días. | Foto: AFP or licensors

“Alertamos a los habitantes que viven en las zonas de mayor alteración del orden público para que eviten los desplazamientos nocturnos. Nuestras actividades continúan en la vigilancia y control de los ríos”, se lee en el comunicado.

Sus argumentos sobre el paro

Por otro lado, en el documento, este grupo armado argumentó que las causas que llevaron a la declaratoria del paro armado responden a lo que calificó como un “terrorismo de Estado” y un modelo económico extractivista, haciendo referencia a los recursos naturales de la región y las tierras ancestrales que han sido sometidos a un despojo sistemático en beneficio de intereses privados y proyectos de infraestructura.

Según su perspectiva, estos factores han impactado de manera negativa a las comunidades locales y ha desestabilizado el equilibrio ambiental en esta región del país.

Debido a esto, la organización terrorista mencionó varios proyectos de infraestructura como el canal seco interoceánico, el puerto multipropósito de Tribugá, y el tren interoceánico del Chocó, como ejemplos de “megaproyectos” diseñados para facilitar el saqueo de los recursos naturales en el Pacífico colombiano.

El ELN hizo un llamado para prevenir movilizarse en la noche por las áreas de alta conflictividad.

En este sentido, el ELN afirmó que el “modelo económico neoliberal” fue el causante del conflicto armado interno al pueblo colombiano, calificándolo como “un plan de terror que genera desastres naturales y un desequilibrio ambiental que atenta contra la humanidad”.

Vale mencionar que esta sería la tercera ocasión en lo que va del año en que el Frente de Guerra Occidental impone restricciones a la movilidad en el suroriente del Chocó. Ante esta situación, la delegación de paz de dicha guerrilla se comprometió a retomar la Mesa de Diálogos con el Gobierno entre el 18 y el 25 de noviembre.

Y es que además del daño que han causado estas medidas, la comunidad se ha visto fuertemente afectada por otros factores como la temporada de lluvias, razón por la que recientemente tuvo que recibir ayuda humanitaria, tras la insistencia de la Corte Suprema de Justicia, la delegación de paz del Gobierno y el Ministerio Público por permitir brindar ayuda a los damnificados.