El departamento de Norte de Santander sigue siendo afectado por el actuar de acciones terroristas por parte de organizaciones al margen de la ley. Al atentado contra la brigada 30 del Ejército, donde fue activado un carro bomba y el atentado contra el presidente Iván Duque, se suma ahora la activación de un artefacto explosivo contra la estación de Policía Atalaya, activado hoy en horas de la mañana, donde resultaron afectadas 14 personas
La institución indicó que se está realizando la recopilación de videos de las cámaras de vigilancia del área afectada, entrevista a testigos y otras labores de investigación criminal. Sin embargo, las autoridades tienen una hipótesis preliminar que sería la guerrilla del ELN la presunta responsable de este nuevo atentado contra la fuerza pública.
Es de recordar, que desde el gobierno nacional han reiterado que hay una alianza criminal entre el ELN y algunas facciones de las disidencias de las Farc, para cometer esta clase acciones terroristas en Norte de Santander.
Sobre el atentado a la brigada 30 y contra el presidente Iván Duque, inteligencia militar y de policía han responsabilizado directamente a alias Jhon Mechas, cabecilla del frente 33 de las disidencias de las Farc.
SEMANA reveló en primicia el perfil e historial criminal de este integrante de la disidencia de la extinta guerrilla. Allí se puede observar que Javier Alonso Veloza García, alias Jhon Mechas, le figura que en 1996 fue integrante de las milicias populares, pero desde el año 2000 estuvo vinculado a las Farc y en la actualidad figura como cabecilla de las disidencias de las Farc, específicamente en el frente 33.
De acuerdo con inteligencia militar su área de influencia, es el sector de Caño Negro, lugar desde donde coordina las actividades relacionadas con el narcotráfico y acciones armadas contra de la fuerza pública.
Según conoció SEMANA, las autoridades siguen recopilando información con informantes sobre Jhon Mechas, por ser la persona que supuestamente coordinó el ataque en contra del presidente Iván Duque desde Venezuela.
Otro de los informes que reveló este medio de comunicación está relacionado sobre el plan de las organizaciones al margen de la ley para atentar contra el jefe de Estado.
Según los documentos recopilados por SEMANA, el nuevo plan contra el presidente se ejecutaría durante una de las aproximaciones del avión presidencial al aeropuerto de Catam, ubicado en el occidente de la capital del país, justo cuando estuviera sobrevolando a baja altura sobre la población de Funza, Cundinamarca.
Desde tierra, francotiradores tenían la orden de dispararles a las turbinas del Fokker F-28, un avión al servicio del presidente de la república. Los atacantes se ubicarían en las veredas El Hato y Las Palmas, a una corta distancia de la pista de Catam.
Uno de los detalles más alarmantes, de acuerdo con los documentos en poder de SEMANA, es que un miembro del esquema de seguridad del presidente Duque sería el encargado de filtrar el dato exacto del aterrizaje del avión a la base militar.
“Fuga de información, posible integrante del esquema de seguridad”, se lee en uno de los archivos. Un hombre identificado como alias Richard sería el encargado de dirigir a los francotiradores que atacarían la aeronave.
Para ejecutar el atentado, los implicados compraron una vivienda y dos camionetas desde hace un mes. Asimismo, en los últimos 15 días, diez personas procedentes del Catatumbo, de las llamadas fuerzas especiales de las disidencias de las Farc, llegaron a Bogotá para cometer ese magnicidio.