Una delicada situación de orden público se ha venido presentado en los últimos días en varios departamentos como Cauca, Chocó, Antioquia, entre otros, donde disidentes de las Farc, así como integrantes del Clan del Golfo, han atacado con explosivos o armas de fuego a la fuerza pública, dejando uniformados fallecidos y heridos.
En medio de esos hechos, la población civil también ha resultado afectada. Ejemplo de ello fue lo ocurrido el pasado domingo, cuando un civil falleció en El Bordo, municipio de El Patía, sur del Cauca, luego de que presuntos disidentes de las Farc activaran una motocicleta bomba en momentos en que por la zona pasaba una patrulla policial.
Teniendo en cuenta esa situación en algunas regiones del país, la Embajada de Estados Unidos en Colombia se pronunció, rechazando “categóricamente la violencia que se ha venido presentando contra la población civil y miembros de la @PoliciaColombia, como reacción de los grupos delictivos a la lucha contra el crimen”.
Además, desde la Embajada de EE. UU. se solidarizaron con las familias que han perdido a sus seres queridos en estos hechos terroristas recientes en el país.
Medellín pagará $ 100 millones por información que advierta sobre amenazas del Clan del Golfo
Las autoridades en el Valle de Aburrá se blindarán ante el plan pistola contra la fuerza pública que impulsa el Clan del Golfo en Antioquia. Para prevenir hechos delictivos, la Alcaldía de Medellín, en conjunto con la Policía Metropolitana, está dispuesta a pagar 100 millones de pesos por datos que anticipen los incidentes.
El anuncio se da luego de que la organización delincuencial se filtrara en la ciudad con el homicidio de dos patrulleros en el corregimiento San Félix, del municipio de Bello. El pasado domingo, con armas de fuego y una granada, los atacaron hasta la muerte mientras estaban desayunando en un establecimiento comercial.
De acuerdo con el comandante de la Policía del Valle de Aburrá, brigadier general Josué Martín Gámez, la medida se toma de manera preventiva ante los altos alcances que han demostrado tener los hombres que están enfilados en las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC).
“La Alcaldía de Medellín está ofreciendo una recompensa de hasta 100 millones de pesos, va dirigida a una acción preventiva que nos permita anticipar cualquier incursión que se pueda presentar por parte de estos delincuentes en Medellín, especialmente en algunos sitios que tenemos identificados”, afirmó el comandante.
En la capital de Antioquia se han identificado riesgos en los barrios de la comuna 8 y en La Sierra; igualmente, en los corregimientos Altavista y San Antonio de Prado. Ahora bien, el dinero se entregará siempre y cuando el ciudadano entregue información certera que pronostique la acción ilegal.
De acuerdo con las unidades de inteligencia de la Policía Nacional, en los municipios del Valle de Aburrá el Clan del Golfo está delinquiendo con el respaldo de las organizaciones ilegales que operan en la subregión. En las últimas horas, la institución confirmó que el grupo de los Pachelly tuvo injerencia en el asesinato de los uniformados en Bello.
En un consejo de seguridad que se llevó a cabo en esta localidad, se dio a conocer que las autoridades decomisaron las motocicletas que usaron los sicarios para cometer la acción terrorista y el esclarecimiento de sus identidades gracias al registro de las cámaras de seguridad del sector, donde se logró percibir los rostros.
También hay una millonaria recompensa para acelerar la captura de los responsables. Por información que lleve a las entidades judiciales al sitio donde se encuentran los cuatro homicidas que participaron en este hecho delincuencial, la Alcaldía de Bello dará 200 millones de pesos.
Finalmente, por recomendación de la Dirección General de la Policía Nacional, en este municipio los patrulleros ya no podrán realizar las tareas de vigilancia en pareja en una moto, sino que el cuadrante deberá estar compuesto por un grupo de cuatro uniformados para reaccionar a tiempo ante cualquier amenaza del Clan del Golfo.
La preocupación está activa en todas las poblaciones de Antioquia, sobre todo las ubicadas en el Urabá y occidente del departamento, por la declaración de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia de asesinar sistemática a los policías y militares que protegen a los municipios.