Cuando en diciembre de 2012 Wang Chanfu, presidente y fundador de la automotriz china BYD, anunció que los taxis eléctricos llegarían a Bogotá a finales del primer semestre del presente año, la idea se veía inalcanzable. La reducción considerable en los gastos de operación, como la gasolina y el cambio de aceite que pasarían de 18 millones de pesos anuales a 6 millones, puso a soñar a los propietarios.Ocho meses después del anuncio se concreta la idea. El próximo 2 de septiembre empieza a funcionar en Bogotá la primera importación de taxis eléctricos, con el apoyo de la Fundación Clinton. Los vehículos se distinguirán del resto porque 50 de ellos serán azules. Por el momento se conoce que los taxis tendrán que ser recargados dos veces al día. En la noche sería la recarga lenta y en el transcurso del día una recarga de 30 minutos, que garantizarían un recorrido de  300 a 350 kilómetros diarios. Los puntos de conexión estuvieron a cargo de Codensa, entidad que debió instalar 35 de ellos en el norte, occidente y sur de la capital, con el fin de garantizar la efectividad del servicio.Esta importación, que tuvo el 0% de arancel, fue posible gracias al Decreto 2658 de 2011 de los Ministerios de Ambiente y Desarrollo Sostenible, de Comercio y de Hacienda. En este mismo Decreto se aprobó la reducción definitiva del arancel de 15% a 5% para buses y camiones híbridos, eléctricos y dedicados a gas natural.Sumado a este esfuerzo, por solicitudes de los Ministerios de Ambiente y de Transporte, se incluyó en la Reforma Tributaria de 2012, la reducción de IVA a buses y taxis eléctricos (incluyendo sus chasises y carrocerías) que operen en la prestación del transporte público, es decir, que estos automotores pagarán 5% en lugar de 16%. Adicionalmente, para promover la adquisición de estos vehículos amables con el medio ambiente y con la salud de las personas, el Ministerio de Ambiente obtuvo la aprobación para la reducción arancelaria durante los próximos 3 años para 2.250 vehículos eléctricos, de los cuales taxis, automóviles, camperos y camionetas podrán ser importados con un arancel del 0% en lugar del 35%, y buses y camiones con un arancel del 0% en lugar del 15%. Sumado a esto, 2.250 vehículos híbridos (taxis, automóviles, camperos y camionetas) podrán ser importados con un arancel del 5% en lugar del 35%.Estas medidas también beneficiarán las electrolineras o las estaciones de carga, pues tendrán 0% de arancel durante los próximos 3 años.“Con este paquete de incentivos, se espera que otras ciudades del país se sumen al uso de vehículos eléctricos e híbridos para el transporte público de pasajeros, para reducir el material particulado que es considerado el mayor problema de contaminación del aire y por lo tanto de salud pública en el país”, sostuvo la viceministra de Ambiente, Adriana Soto. De acuerdo con los resultados preliminares de un estudio de costos por degradación ambiental realizado por el Banco Mundial para el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible en 2012, las pérdidas anuales causadas en el país por la contaminación del aire, específicamente por material particulado, ascienden a $5,7 billones, es decir, el 1.1% del PIB de 2009. Además, el estudio reveló que la contaminación del aire en las ciudades causa la muerte a 5.000 personas anualmente.“Los vehículos eléctricos, a diferencia de los vehículos convencionales que operan con diésel y gasolina, no generan contaminación atmosférica ni auditiva y su eficiencia energética es superior. La ventaja adicional con respecto a otros países es que estos vehículos se abastecen de una energía, que en el caso de Colombia, es limpia pues no proviene de combustibles fósiles sino del agua”, concluyó la Viceministra. La implementación de este nuevo proyecto se dará poco a poco y estos 50 primeros taxis eléctricos convertirán a la capital en 'ciudad-piloto' para Latinoamérica.