La Fiscalía General maneja varias líneas de investigación en el caso de Timothy Alan Livingston, el ciudadano estadounidense que ingresó con dos menores de edad en el Hotel Gotham, ubicado en el sector de El Poblado, en Medellín.
Mientras se recolectan todos los videos de las cámaras de seguridad para establecer lo que ocurrió en el hotel, un grupo de investigadores busca verificar la forma en que el estadounidense ingresó al establecimiento, si estuvo acompañado por alguien más y cómo contactó a las menores de doce y trece años de edad.
Igualmente, se recolecta toda la documentación para verificar si el extranjero ya había estado antes en el hotel. Para responder esta y otras preguntas, fue citado este martes el empleado del hotel que se encontraba de turno el día de los hechos y que entregará, según se ha podido establecer, información clave sobre el actuar de Livingston.
La Fiscalía General quiere identificar si el estadounidense tuvo contacto con alguien más en la capital antioqueña antes de ingresar al hotel, por qué llegó justo a ese establecimiento, cómo llegaron y, lo peor, cómo ingresaron las menores de edad hasta el cuarto en el que se encontraba el hombre de 37 años de edad.
Por el momento, se tiene conocimiento de la presencia de un niño de diez años en inmediaciones del hotel que cumpliría una misión de “campanero”, es decir, de alertar en caso de que alguien se diera cuenta de que estaban entrando niñas al hotel para ser explotadas sexualmente.
Este dato es clave en la investigación pues, como se lo indicó a SEMANA una fuente de la Fiscalía, indicaría la existencia de una red organizada a la explotación sexual de menores. Por esto, se recolectarán más testimonios de empleados del hotel y vecinos del sector con el fin de recolectar datos.
Además, se cuenta con el teléfono celular de una de las dos menores explotadas y que fueron halladas por las autoridades en el cuarto del Hotel Gotham. Los datos podrán identificar a la persona que las contactó con el estadounidense, las conversaciones y transacciones que se hicieron.
Esta información es clave para realizar el respectivo cuadro con todas las personas que de manera directa e indirecta permitieron la explotación sexual de las dos menores de edad, quienes –en compañía de psicólogos– ya entregaron sus declaraciones.
Este martes se conoció que la Procuraduría General abrirá una indagación disciplinaria contra los policías que dejaron en libertad a Timothy Alan Livingston pese a que estaba, sin ningún tipo de justificación, con las dos menores de edad en su habitación.
Con este nuevo proceso en el escandaloso caso, se trata de determinar si los funcionarios adscritos a la Policía Metropolitana del Valle de Aburra habrían cometido irregularidades en el momento de la captura y traslado del extranjero acusado del grave delito de acceso carnal abuso y actos sexuales con dos menores de 14 años.
“Se analizarán las posibles irregularidades en los procedimientos por parte de los servidores encargados de la custodia del detenido, así como las acciones judiciales pertinentes para la verificación y captura por la comisión del posible delito u omisión en las gestiones pertinentes para ello”, detalló el organismo de control disciplinario.
Para el Ministerio Público, lo preocupante de todo el panorama es que los policías –al parecer– cometieron posibles irregularidades en los procedimientos de custodia de Livingston y también en las acciones judiciales para capturarlo después de que fue sorprendido con dos niñas en un hotel en el sector de El Poblado, en Medellín.
“Los policías pudieron incurrir en falta disciplinaria, pero se indagará si es necesario vincular o determinar la existencia de más personas adscritas a otras entidades, quienes igualmente pudieron participar en los hechos que permitieron que el presunto agresor saliera posteriormente de Colombia hacia Estados Unidos”, informó el ente de control.