Las empresas antioqueñas han resuelto ser parte de la solución frente a la crisis que se avecina ante el coronavirus. Según anunció la fundación Proantioquia, el grupo empresarial aportará 15.800 millones de pesos para fortalecer las Unidades de Cuidados Intensivos de hospitales de la región. De esta iniciativa son parte la Fundación Grupo Argos, Grupo Sura y su Fundación, Grupo Nutresa, Colombiana de Comercio (Corbeta) y la Fundación Fraternidad Medellín. Puede leer: La impresionante gráfica que muestra cómo se ha propagado el coronavirus en Colombia.  Según aclaró Proantioquia en un comunicado, la contribución será destinada "a la compra de equipos para dotar nuevas UCI en los Hospitales San Vicente Fundación y Pablo Tobón Uribe, lo cual aumentará la capacidad instalada de la ciudad, para todo el departamento, en aproximadamente un 25 %". Así, estos hospitales contarán con respiradores, monitores, flujómetros de aire y de oxígeno, aspiradores de pared y otra serie de equipos indispensables para mantener con vida y bienestar a los pacientes más graves. Gonzalo Pérez, presidente de Suramericana, dijo: "Esta contribución para fortalecer la atención local en salud forma parte de las diversas acciones que desde Sura hemos emprendido para responder al desafío común que hoy tenemos como sociedad de mitigar y afrontar los efectos del covid-19, respondiendo siempre a nuestro rol clave de procurar bienestar y cuidado a las personas". Le puede interesar: Colombia habilitará primera clínica para atención del coronavirus en diez días. Azucena Restrepo, presidenta ejecutiva de Proantioquia, hizo un llamado para que el sector empresarial y social participe en la estructuración de fondos que permitan auxiliar a los hospitales de alta complejidad para, de esa manera, aumentar la capacidad de unidades de cuidado crítico, entrenamiento y capacitación de personal especializado en la atención de la alta complejidad médica, material de bioseguridad para el personal que atienda pacientes con coronavirus, consecución de insumos para la atención masiva de pacientes, material médico-quirúrgico, medicamentos, ropería, entre otros. Y una de las cosas más importantes: "Recursos para sostener la operación, dado que el nivel de ingresos de los hospitales se afectará con la cancelación de procedimientos programados, mientras siguen asumiendo los costos de la atención y disponibilidad médica".