Con el avance de la vacunación contra la covid-19 en el mundo también ha ido avanzando el movimiento antivacunas en varios países, donde afirman que es su derecho el no inocularse contra el virus.

Aunque las campañas gubernamentales son, prioritariamente, para acercar a todas las poblaciones al biológico, también se han hecho mediciones de la diferencia entre la tasa de hospitalización y muerte por covid de las personas vacunadas y no vacunadas, y esto se tiene en cuenta para hablar de la efectividad de las vacunas.

En Colombia, la Dirección de Epidemiología y Demografía y la Dirección de Medicamentos y Tecnologías en Salud del Ministerio de Salud y Protección Social adelantan periódicamente actualizaciones del estudio de Efectividad de las vacunas contra el covid-19 - Cohorte Esperanza, el cual arrojó nuevos resultados a nivel país, relevantes para la ola actual que se enfrenta asociada a la variante ómicron.

Julián Fernández, director de Epidemiología, dijo a través de un comunicado de prensa emitido por el ministerio que los hallazgos de este estudio –del periodo entre el 28 de noviembre y el 8 de enero– muestran que, como ya era conocido, el riesgo de hospitalización y muerte se incrementa con la edad.

Sin embargo, en todas las edades, a partir de los 30 años, este riesgo es varias veces más alto para el caso de las personas no vacunadas, comparadas con las personas vacunadas del mismo grupo de edad, informaron las autoridades.

En un video publicado por el Ministerio de Salud, Fernández explica las gráficas arrojadas por el estudio de la Cohorte Esperanza, en las que se detalla el número de veces que una persona no vacunada puede llegar a ser hospitalizada o morir por la covid-19.

“Para las tasas de hospitalización puede variar entre dos hasta cinco veces, por ejemplo. Podemos decir que en las personas de 80 años y más el riesgo de hospitalización es cinco veces mayor si no se está vacunado comparado con las personas de la misma edad que tienen una vacuna con esquema completo”, aseveró el funcionario.

“De la misma manera, podemos observar una diferencias muy importantes en el riesgo de muerte, entre las personas no vacunadas y las personas vacunadas con esquema completo. Ese riesgo relativo puede oscilar entre cuatro e incluso llegar a ser nueve”, añadió en el video.

Para este último análisis se usó un enfoque de cohorte dinámica y se incluyeron 22.165.609 personas en total. El estudio de Cohorte Esperanza espera, según el comunicado, dar a conocer pronto un informe y un estudio científico sobre la efectividad de las vacunas contra la covid-19 para todas las edades en Colombia.

Ómicron en Colombia

Ante el pico por la variante ómicron, Fernández aseguró también en el comunicado que esta situación constituye un gran desafío para los sistemas de salud, principalmente por su impacto sobre los servicios de atención y la afectación del talento humano en salud, así como de trabajadores de otros sectores estratégicos de la sociedad.

Pero anotó que “se ha encontrado, en casi todos los países, que la mortalidad y la hospitalización es proporcionalmente más baja que con las anteriores variantes, para el alto volumen de contagios. La mortalidad es mucho más baja de la que se había observado en los anteriores picos”.

Esta relativa menor severidad se explica por dos razones fundamentales, de acuerdo con el Ministerio: la primera, que el virus es menos invasivo a nivel pulmonar, es decir, que su capacidad de producir enfermedad grave (virulencia) es relativamente menor.

La segunda está relacionada con la vacunación. “Aunque de todas maneras personas vulnerables, especialmente no vacunadas, o con enfermedades crónicas que no se hayan reforzado pueden complicarse y morir”, aclaró el funcionario.

Julián Fernández indicó en el comunicado que frente a la nueva variante la efectividad para prevenir el contagio se ve disminuida, especialmente sin refuerzo, pero esa efectividad para prevenir las formas graves, que depende de un mecanismo distinto, llamado inmunidad celular, sigue siendo alta y se incrementa mucho más con el refuerzo, el cual aumenta significativamente, además de los niveles de anticuerpos neutralizantes, la respuesta de las células T o de memoria, contra ómicron.