La situación de orden público en Norte de Santander sigue siendo delicada luego de que en la madrugada de este lunes se produjera el estallido de una granada de fragmentación que no dejó personas heridas.

El hecho se registró en el municipio de El Zulia, donde de acuerdo con el reporte oficial, desconocidos lanzaron una granada a un establecimiento nocturno.

Las autoridades indicaron que el hecho produjo pérdidas materiales, como daños en ventanas y puertas del local, debido al impacto de la onda explosiva.

“En el momento de la activación de la granada no había nadie en el local, allí se decidió cerrar a la 1:00 a. m., dando cumplimiento a las órdenes de la alcaldía por los últimos hechos violentos registrados en el municipio, en donde ha sido atacada en dos oportunidades la estación de Policía de Astilleros”, narró a RCN Radio un testigo.

La Policía y la Fiscalía iniciaron las investigaciones para tratar de determinar los responsables de este hecho que se suma a otras acciones de grupos armados ilegales en esa región del país.

Como se recuerda, hace apenas unas horas se registró otro hecho de alteración del orden público cuando fue atacada con fusil las estación de Policía en el corregimiento de Aguaclara, ubicada en zona rural de Cúcuta.

“Durante varios minutos vivimos momentos de angustia al escuchar ráfagas de fusil, la gente se guardó en sus casas para esconderse y evitar quedar en medio de este fuego cruzado”, señaló Jaime Contreras, habitante de ese corregimiento.

Por su parte, el comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, general Oscar Moreno, señaló que “el ELN es el responsable del hostigamiento a la estación de Policía, pero afortunadamente nuestros hombres reaccionaron rápidamente y no hubo víctimas, ni heridos”.

Un soldado muerto y tres heridos tras caer en campo minado

Igualmente, el Comando de la Fuerza de Tarea Vulcano, unidad adscrita a la Segunda División del Ejército Nacional, informó que “en horas de la mañana del domingo 13 de febrero, uniformados del Batallón de Ingenieros N.30 fueron víctimas de un área minada, que habría sido instalada por integrantes del grupo armado organizado residual Estructura 33″.

El hecho se presentó cuando los uniformados desarrollaban operaciones de control territorial en la vereda Socuavo, zona rural de Tibú.

La detonación de los artefactos explosivos causó la muerte del soldado profesional Miguel Ángel Natera Sagarra, y tres más resultaron heridos, uno de ellos de gravedad.

“En estos momentos son trasladados vía aérea a la Clínica Medical Duarte de Cúcuta para recibir atención médica”, aseguró el comunicado.

Agregó que esta acción “atenta contra los derechos humanos y transgrede flagrantemente las disposiciones del derecho internacional humanitario, haciendo uso de métodos de guerra no convencionales de forma indiscriminada en contra de los integrantes de la Fuerza Pública y la población civil”.

Volqueta bomba que contenía más de 80 artefactos explosivos en Tibú

En esa región de Norte de Santander se han registrado varios atentados y la aparición de explosivos, como el caso que se presentó hace menos de una semana cuando las autoridades tuvieron que intervenir por la presencia de dos automotores sospechosos.

Organismos de control como el Ejército Nacional, trabajando de la mano con la Fuerza Aérea, llegaron hasta el departamento de Norte de Santander en el municipio de Tibú, fronterizo con Venezuela, en donde lograron deshabilitar una volqueta bomba que contenía 85 artefactos explosivos y alrededor de 19 bocas de fuego.

Dicha volqueta bomba fue hallada en Tibú, donde hace poco hubo un ataque con explosivos en la estación de Policía. El carro de gran volumen había sido abandonado en el corregimiento Campo Dos, zona rural del departamento.

Los protocolos de desactivación y prevención estuvieron durante todo el día del pasado martes 8 de febrero y se extendieron hasta la noche del mismo, cuando a la volqueta explosiva se le sumó otro vehículo. Un taxi que también se encontraba en el mismo sitio tuvo que ser intervenido, puesto que de igual manera contenía artefactos explosivos en la vía que conduce de ese municipio a Cúcuta.

Ante lo ocurrido, el paso y camino de entrada hacia Tibú había quedado restringido hasta nuevo aviso. La comunidad del sector se encuentra atemorizada.

Aunque fueron desactivados cada uno de los medios de transporte, las advertencias permanecieron en pie para el corregimiento Campo Dos.

De igual manera, viendo la situación que alertó a la comunidad, el mayor general Hernán Alejandro Bustamante, director de Seguridad Ciudadana, estuvo desde Cúcuta llevando a cabo las respectivas investigaciones judiciales, pues no se descarta que las acciones terroristas hayan sido ejecutadas por grupos armados.

“La Policía de Colombia ofrece el pago de una recompensa de 100 millones de pesos para quienes brinden información que permita identificar y capturar a todos los explosivitas de los diferentes grupos armados que delinquen en Norte de Santander”, indicó el alto oficial.