El encendido de la primera turbina del proyecto hidroeléctrico Ituango no es solo cuestión de energía para reducir futuros riesgos de apagón. También es cosa de seguridad para las comunidades aledañas a la obra, de la cual, se ha dicho ya, tuvo graves fallas en el diseño y construcción.
La Procuraduría General, en busca de apoyar la protección ciudadana, envió una carta que está dirigida a las ministras de Minas, Irene Vélez; la de Medio Ambiente, Susana Muhamad; al igual que al gobernador Aníbal Gaviria; al director de EPM, Jorge Carrillo, y al director de Riesgo de Desastres, Javier Pava.
En el documento, la entidad del Ministerio Público hace varias advertencias, dentro de las cuales se destaca que, aunque “se evidencia un continuo monitoreo en las estructuras de la represa y en las obras construidas en el manto rocoso, respecto a la estabilidad de la obra”, no se puede perder de vista que se mantiene el riesgo para las comunidades.
“Hidroituango mantiene el estado de riesgo debido a que el flujo continuo del río Cauca es descargado por la estructura del vertedero”.
La Procuraduría enfatiza en que, “para disminuir el riesgo se requiere poner en funcionamiento las turbinas de generación”. Este ha sido el paso que no se ha podido dar y que, durante el primer semestre de este año, se dijo que la hora cero para el encendido de la primera sería el 26 de octubre, fecha que se ha ido extendiendo y, ahora, se prevé para noviembre.
Alertas y recomendaciones de la Procuraduría
1. Para el funcionamiento de las turbinas, Hidroituango se encuentra en una etapa decisiva, razón por la cual se recomienda que EPM cumpla con todas las pruebas y garantías para el funcionamiento efectivo de cada uno de sus componentes, desde lo mecánico, hidráulico y eléctrico, entre otros, cumpliendo con los tiempos necesarios para dichas actividades.
2. EPM tiene un adecuado Plan de Emergencia y Contingencia con responsabilidades claras, redundancia y una cadena de llamadas bien definida y actualizada. Se debe garantizar la continuidad y calidad de este instrumento.
3. EPM ha instalado un Sistema de Alerta Temprana robusto y redundante, pero es vulnerable al vandalismo y a los grupos armados ilegales; es necesario evaluar la estrategia o el tipo de equipos y continuar las campañas de sensibilización de la Comunidad para su cuidado y buen manejo.
4. Hay serias falencias en la Gestión del Riesgo de Desastres y el Ordenamiento Territorial de los cinco municipios aguas abajo: Valdivia, Cáceres, Tarazá, Caucasia y Nechí. Tienen planes desactualizados, no hay gestión documental ni continuidad en los procesos, no cuentan con el personal adecuado para su manejo y los organismos de socorro no tienen el personal, entrenamiento, ni los equipos necesarios para la atención de emergencias.
5. Es necesario poner en funcionamiento las unidades de generación porque es la manera de mitigar el riesgo sobre la represa. Sin embargo, desde la perspectiva de la Gestión del Riesgo de Desastres, poner a funcionar el sistema sin haber hecho todas las pruebas necesarias representa un riesgo alto.
6. Por las condiciones de operación continua del vertedero, el proyecto y las comunidades aguas abajo siguen sujetas a los niveles de alerta establecidos en la Circular 032 de julio 26 de 2019 de la UNGRD y por lo tanto se mantiene la alerta y la situación de contingencia. Esta circunstancia especial, refuerza el llamado que hace la Procuraduría para que se priorice el cumplimiento estricto de las pruebas necesarias de todos los equipos y sistemas antes de poner a funcionar cada unidad de generación, para así garantizar la estabilidad del proyecto, la seguridad de los trabajadores y de las comunidades.
7. El riesgo se incrementa por el tiempo de exposición a una amenaza, de allí que cualquier demora en las obras o pruebas necesarias para poner en funcionamiento las unidades de generación representa un mayor riesgo para los trabajadores y para las comunidades aguas abajo de la presa.
8. Es indispensable que EPM, en su condición de titular de la licencia continúe las gestiones que permitan superar la contingencia ambiental y que estas acciones se articulen y armonicen con las encaminadas a garantizar la estabilidad del proyecto.