En el marco de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, afirmó que la transición hacia una biodiversidad positiva debe hacerse con las comunidades y entendiendo las dinámicas de cada territorio, bajo el único sentido unificado de cambiar la vida de la gente.

“La pérdida de biodiversidad es la crisis mayor, y todavía no entendemos cómo es posible que separemos, institucional y mentalmente, la crisis de biodiversidad de la crisis climática: hacen parte de una sola crisis, que tiene su raíz en la forma como habitamos y vivimos en el planeta”, expresó la ministra Muhamad en el evento de líderes ‘Cuenta regresiva para la COP15 de Biodiversidad’, cumbre que se hará en Montreal (Canadá), del 7 al 12 de diciembre de este año.

Ante líderes de todo el mundo, la ministra de Ambiente dejó claro que para el Gobierno nacional cuidar la biodiversidad significa actuar unificadamente y hacia un solo objetivo en las regiones. En ese sentido, también manifestó que las proclamaciones de las cumbres, así como las metas que allí se plantean, no tienen sentido si no producen un efecto concreto en la vida de los ciudadanos.

“¿De qué le sirve a un ciudadano promedio en Colombia vivir en uno de los países más biodiversos del mundo? Como Gobierno, esa es la pregunta que tenemos que responder. Queremos proponerles una coalición de muchos países para acelerar el cambio a pesar de los acuerdos o no que tengamos en la Cumbre de Biodiversidad, un cambio que cuente también con las vivencias reales y concretas de los territorios, de la conservación, de los territorios de la vida, del agua y del campo”, expresó Muhamad.

Territorios amenazados por economías ilícitas

En línea con lo expuesto por el presidente Gustavo Petro en su discurso, la ministra Susana Muhamad reiteró la relación existente en Colombia entre riqueza medioambiental y paz. En tal virtud, expuso que territorios ecosistémicamente importantes, donde hubo conflicto armado por décadas, hoy vuelven a estar amenazados por economías ilícitas.

“Por eso necesitamos transiciones colectivas y justas. Debemos trabajar sobre la lógica de visibilizar a la ciudadanía en terreno, a esos pueblos en terreno que hoy están haciendo las transiciones; un reto como Gobierno es conectar los cambios que ya están sucediendo. Tanto en la COP de Biodiversidad como en la COP del Clima, enviemos un mensaje de esperanza, de realidad, un mensaje que visibilice la transformación; eso solo lo haremos si visibilizamos lo que la gente está haciendo en territorio. Es la invitación que queremos hacer”, concluyó la funcionaria en su primera intervención internacional como ministra de Ambiente de Colombia.

A principios de septiembre, el Ministerio de Ambiente presentó un balance sobre las cifras de deforestación en el país. Al respecto, Susana Muhamad manifestó que en las dos últimas décadas se han deforestado 3.182.876 hectáreas de bosque tras un análisis de reportes del Sistema de Monitoreo de Bosques y Carbono del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam).

Según expuso Muhamad, entre 2001 y 2021, la región de la Amazonía ha sido la más afectada con la pérdida de 1.858.285 hectáreas, lo que significa que, en promedio, en esta región se han deforestado 88.490 de manera anual. En comparación con las cifras del primer semestre de 2021, la ministra señaló que la deforestación aumentó en la Amazonía en 11 %, con 52.460 hectáreas, y aseguró que se estima que la tendencia de aumento continuará.

“Queremos sentar una línea base de dónde estamos iniciando como Gobierno (...). Este punto de partida lo que nos muestra es la gravedad del fenómeno. Este año ya vamos 11 % más alto sumando los dos trimestres, en comparación con el año pasado. Viene el último trimestre donde se presenta la afectación más grave si no hacemos algo”, dijo.

Cifras de deforestación en las últimas dos décadas. | Foto: Ministerio de Ambiente

Según el reporte, en el primer trimestre de 2021 se deforestaron 45.500 hectáreas, mientras que durante el mismo periodo de este año la cifra fue de 50.400. Así mismo, frente al segundo trimestre, que corresponde a la primera temporada de lluvias en el país, en 2021 1.580 hectáreas fueron deforestadas, mientras que en 2022 la cifra ascendió a 2.060.

“Meta, Caquetá, Guaviare, Putumayo, Norte de Santander y Antioquia son los seis departamentos más afectados”, anotó la ministra.

De acuerdo con la cartera ambiental, “la praderización orientada al acaparamiento de tierras, prácticas insostenibles de ganadería extensiva, cultivos de uso ilícito, desarrollo de infraestructura de transporte no planificada, extracción ilícita de minerales, tala ilegal de madera y ampliación de la frontera agrícola en áreas no permitidas” son las principales causas de la deforestación en el país.