El departamento de Cundinamarca, al igual que Bogotá, ha venido tomando una serie de medidas restrictivas para disminuir los niveles de contagio y de ocupación de unidades de cuidado intensivo –UCI– que se presenta actualmente en el departamento, entre esas el toque de queda nocturno, que irá hasta el próximo 22 de enero. Hasta la fecha, el departamento registra un 82 % de ocupación en camas UCI.
Teniendo en cuenta la emergencia, el gobernador Nicolás García recordó este lunes que cientos de equipos que podrían ayudar a solucionar la alta ocupación en las UCI están listos para ser utilizados y que solo falta una autorización del Invima para ponerlos a trabajar. Se trata de 134 ventiladores con los que cuenta el departamento para mitigar la alerta sanitaria y 235 que se encuentran en la Universidad de la Sabana y que llevan 4 meses sin ser utilizados a la espera del pronunciamiento de la entidad.
Durante un balance, el gobernador anunció una disminución del 87 % al 82 % en la ocupación de camas UCI, esto debido a que el departamento logró aumentar la capacidad en municipios como Sopó, Soacha y Facatativá.
“Mientras los cundinamarqueses se cuidan responsablemente en el territorio, nosotros seguimos haciendo una expansión de UCI. Hemos habilitado en lo que va del año cerca de 87 nuevas camas y finalizando este semana tendremos 111. Nuestra ocupación hoy es del 82 % (...). Sin embargo, esto no es una noticia para relajarse, todo lo contrario, es para seguir motivados cuidándonos”, señala el gobernador.
Entre las UCI que entrarán de manera adicional esta semana, muchas beneficiarán al municipio de Girardot, uno de los de mayor ocupación.
Sin embargo, le hizo un llamado al Invima para que defina la situación con los más de 300 ventiladores que están a la espera de aprobación de uso: “Agradezco a los alcaldes por cada una de las medidas que han tenido en sus territorios y quiero aprovechar también este mensaje de trabajo y de gratitud con todo el equipo de la Secretaría de Salud para pedirle al Invima que nos defina acerca de la utilización de los 134 ventiladores que tenemos hace 4 meses”, dijo. “También necesitamos una respuesta acerca de los ventiladores de la Universidad de La Sabana. Ahí tenemos cerca de 235 ventiladores que pueden salvar vidas de cundinamarqueses, de bogotanos, de colombianos”.
De acuerdo con el gobernador, una respuesta rápida es necesaria. Incluso, en caso de que el Invima defina no autorizar los ventiladores, “podemos no girar los recursos y habilitarlos para comprar nuevos equipos”.
Hasta el momento, el Invima no se ha pronunciado con relación al llamado urgente que ha hecho el gobernador de Cundinamarca y al que se han unido grupos defensores de los derechos de los pacientes, como la Organización Defensa del Paciente, quienes en varias ocasiones han señalado que son varios los enfermos covid en Bogotá que están a la espera de una cama UCI.
En el mismo anuncio, el gobernador hizo un balance de la medida de toque de queda en el departamento durante el reciente fin de semana. El mandatario de los cundinamarqueses aseguró que había sido positivo y con un muy buen comportamiento en la mayoría de los municipios: “Tuvimos cerca de 536 comparendos por parte de la Policía, transitaron por el departamento cerca de 430.000 vehículos, es decir, la mitad de los que transitaron en el mismo periodo del año pasado. Eso significa que estamos evitando los desplazamientos”, destacó García.