Juan Diego Alvira estuvo en una de las estaciones de gasolina de la ciudad de Pasto, capital de Nariño. Allí, quienes desean tanquear sus carros y motos con gasolina, deben soportar filas de hasta de dos kilómetros, todo en medio de la incertidumbre por la escasez del combustible como consecuencia del cierre de la vía Panamericana por los deslizamientos de tierra en el sur de Nariño.

Desesperados, algunas personas permanecen en sus vehículos o en los andenes, y ya completan hasta más de ocho horas haciendo fila para poder echarle gasolina a sus carros o motos.

“Estamos desde las ocho de la noche haciendo fila (...) toda la noche hemos aguantado frío, hambre”, comentaron a Alvira algunas personas que estaban haciendo fila en una estación de gasolina, de las 49 que hay en Pasto.

De acuerdo con Alvira, de esas 49, 17 funcionan irregularmente, es decir, por ratos u horas, teniendo en cuenta la escasez de combustible que está padeciendo la capital de Nariño.

Por el momento, las autoridades locales hablan de dos o tres días de abastecimiento de combustible, algo que tiene bastante preocupada a la ciudadanía.

“La situación va para una semana ya. Hace cinco horas estoy esperando y cuando estaba cerca dijeron que ya habían llegado al tope, que tenían que descansar y nos hicieron esperar”, contó un ciudadano que, a pesar de que estuvo haciendo una larga fila para tanquear su vehículo, no lo logró.

Carlos Bastidas, alcalde encargado de Pasto, le comentó a Juan Diego Alvira las medidas que están tomando ante la escasez de combustible.

“Ya se expidió un decreto que permite que únicamente se vendan 50 mil pesos para vehículos de servicio público, 30 mil para particulares, y 15 mil para motocicletas. Hasta ese tope se mueve”, dijo Bastidas.

Y es que, desde las alturas, con el dron de SEMANA se pueden apreciar las interminables filas de vehículos y motos que intentan ser abastecidos con gasolina.

Teniendo en cuenta lo anterior, Soraya Arias, presidente del Consejo Gremial de Nariño, dijo a Alvira que calculan que más de diez mil empleos están en riesgo.

“Qué van a hacer las personas que no pueden transportar la leche, que no pueden acopiarla. Pues van a tener que suspender (sus labores). Ayer en la reunión, varios empresarios hablaban de dar vacaciones no remuneradas a sus empleados”, comentó Arias.

Y es que una nueva emergencia por cuenta de los deslizamientos de tierra se presentó en el sur del departamento de Nariño, exactamente en el municipio de Chachagüí. SEMANA conoció que sobre las 10:57 p. m. del pasado viernes 13 de enero, se registraron al menos cuatro derrumbes debido a las fuertes precipitaciones.

Como consecuencia, la vía Panamericana, que conduce de Pasto a esa municipalidad, se encuentra afectada en los kilómetros 21 y 23, sectores Palma Alto y Hatoviejo, respectivamente.

La preocupación se concentra porque ese corredor es el que conduce al aeropuerto Antonio Nariño, ubicado en Chachagüí, y el cual presta sus servicios a la capital de Nariño y el departamento en general.

Cuatro derrumbes se presentaron en la vía que comunica a Pasto con el municipio de Chachagüí. | Foto: A.P.I

Desde tempranas horas de este sábado 14 de enero, se reportaron traumatismos en la movilidad. Por más de diez horas la vía permaneció completamente cerrada y las personas se vieron obligadas a cruzar el derrumbe a pie y del otro lado se embarcaban en vehículos que los transportan hacia sus destinos.

Se reportaron trancones en la vía por los derrumbes. | Foto: A.P.I

A través de las redes sociales, los críticos se fueron contra el Instituto Nacional de Vías (Invías) porque, supuestamente, no estuvieron presente en la emergencia, por lo que la Gobernación de Nariño tuvo que hacerse cargo.

Sin embargo, SEMANA consultó con esa entidad y desde el Invías reiteraron que se encuentran trabajando en los estudios para la construcción de una variante de 1,8 kilómetros que permitiría conectar a Nariño con el centro del país.

Las personas deben cruzar el derrumbe a pie para llegar a sus destinos. | Foto: A.P.I