Después de 73 días de búsqueda, la Fiscalía encontró a Jaime Andrés Manco (23 años), Andrés Felipe Vélez (21 años) y Santiago Urrego Pérez (18 años) en una fosa común en el sector conocido como El Morro, en la Comuna 13 de Medellín. Según las primeras versiones, las autoridades habrían recibido información que les permitió establecer el lugar donde criminales los habían enterrado después de asesinarlos. El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, confirmó el hallazgo de los cuerpos en la tarde de este viernes en una rueda de prensa: "Todo indica, de acuerdo a la investigaciones, a la información que tenemos, de acuerdo al trabajo de campo que se realiza en este momento, que se han hallado tres cuerpos sin vida en el sector del Morro, entre los límites de San Javier, Comuna 13, y Altavista. Al parecer, los cuerpos corresponden a los de los tres jóvenes desaparecidos desde el 18 de septiembre… Son 73 días luego de que desaparecieron el 28 de septiembre". Gutiérrez aseguró que desde el día uno no habían cesado las investigaciones y que en este tiempo han podido determinar que detrás del crimen estarían cuatro jóvenes del sector, quienes pertenecen a la banda La Torre; de ellos ya fueron capturadas dos personas el mismo 18 de septiembre por porte ilegal de armas, ellos son "alias el Soldado, a quien se le dio casa por cárcel, y alias Pelo de Loco, que está detenido en este momento. Y las otras dos personas están identificadas y van a ser capturadas. Todo el aparato judicial está para hacer responder a estos asesinos y delincuentes", dijo el alcalde, quien pidió que al jefe de la banda, Alexánder Jaramillo Cartagena, conocido como Samir, quien fue capturado hace unos días, se le imputen los cargos de asesinato por línea de mando. En contexto: Ofrecen $50 millones para encontrar a jóvenes desaparecidos en la comuna 13 "Yo acabo de reunirme con las mamás de Jaime, de Andrés Felipe y de Santiago, con ellas hemos estado siempre acompañándolas. Estoy reunido justamente aquí en mi oficina con ellas. Fueron las primeras en ser informadas", dijo el alcalde visiblemente afectado por la noticia. Pidió que sobre los capturados "caiga todo el peso de la ley". "Espero que este alias soldado, a quien se le dio casa por cárcel luego de ser capturado con una subametralladora, se le revoque la medida y se le lleva a un centro carcelario", aseveró.Puede leer: Zozobra por la desaparición de tres jóvenes en la Comuna 13 Gutiérrez confirmó que en este momento el CTI de la Fiscalía está haciendo la exhumación de los cuerpos con el apoyo de la Policía y del Ejército. "Toda la solidaridad con estas mamás, con la familia, con los amigos", terminó el alcalde. En todos estos días, Claudia Correa, madre del joven Andrés Felipe, insistió en la Fiscalía, en la Policía y en la Alcaldía para que no olvidaran su caso, para que por lo menos encontraran a su hijo, pues sentía que cada vez estaba sola en su búsqueda. Hace unos días le había dicho a SEMANA: “Yo sé que mi hijo está muerto, eso hemos podido averiguar, pero que por lo menos nos entreguen los cuerpos de esos muchachos, que podamos sepultarlos”. En todo este tiempo intercaló su trabajo con la búsqueda: iba a la comuna 13, arriesgaba su vida, iba a reuniones de víctimas, preguntaba. “En las noches no puedo dormir”, dijo. Los jóvenes había desaparecido en la noche del 18 de septiembre después de que salieron en taxi del barrio Belén Las Violetas para que Jaime Andrés Manco recogiera una ropa en la casa de su mamá, la misma casa de la que había huido semanas atrás después de presenciar el asesinato de un amigo en medio de una reunión alicorada. Manco había decidido escaparse porque los asesinos lo había intimidado para que no dijera nada de lo visto. Manco se fue a vivir a Belén Las Violetas, donde se hizo amigo de Andrés Felipe Vélez y de Santiago Urrego. Su amistad no fue muy larga. Poco se sabe de sus últimos momentos. Claudia Correa dijo en su momento que su hijo llegó con los dos amigos a Belencito Corazón, esperaron en el taxi a que Manco sacara la ropa y la prueba está en una conversación de chat donde Vélez le dice a un amigo que lo espere un rato en la casa, que están haciendo una vuelta en la Comuna 13 y en breve regresan para ver otro capítulo de El señor de los cielos. Minutos después, cuando regresaban, un grupo de muchachos detuvieron el taxi, bajaron a los tres muchachos y nunca más se supo de ellos, todo fue como si les hubiera tragado, de un bocado, el tiempo. Hoy, las autoridades han podido comprobar que quienes los bajaron de un taxi fueron hombres de la banda la Torre, que desde hace varios meses libra una guerra por toda la Comuna 13 para quedarse con las ganancias que dejan el microtráfico y la extorsión. Semanas después de la desaparición, la Fiscalía encontró algunas prendas de vestir que los muchachos llevaban la noche del 18 de septiembre, además encontraron cintas con las que pudieron amarrarles las manos y donde había marcas de sangre. Después de este hallazgo, la búsqueda se hizo más difícil y la Alcaldía tuvo que ofrecer 50 millones de recompensa para que una comunidad atemorizada por las bandas criminales brindara información. Lo que sucedió esa noche está por aclararse y el alcalde de Medellín le pidió al aparato judicial que llegue hasta el fondo de este crimen que enluta a la capital paisa, pues ahora las familias necesitan saber la verdad.