Fuentes de la Policía confirmaron que fue encontrado muerto en la vereda Los Almendros del municipio de Arauquita el subintendente Andersson Alberto Hernández Villar. En dicha zona, según las autoridades, delinque la Comisión Camilo Cienfuegos del ELN y el Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc.

Por el momento es escasa la información que han entregado las autoridades sobre la muerte del uniformado. La referencia que se tiene del hecho es del 18 de mayo, cuando se informó que Hernández viajó desde Bucaramanga con rumbo a la frontera con el estado Tachira en Venezuela, para visitar a sus familiares.

Las versiones iniciales señalaron que el suboficial fue secuestrado en la frontera con el vecino país y desde entonces no se tenían noticias suyas, hasta este martes 25 de mayo cuando se confirmó la aparición del cuerpo sin vida del policía.

Los superiores del oficial están a la espera de que se corrobore la información que señala que el cuerpo de Hernández apareció con varios impactos de arma de fuego. El uniformado que llevaba más de 20 años de servicio en la institución policial tenía permiso para ir por unos días a visitar a su papá en Venezuela.

La Fiscalía General de la Nación investiga la muerte de un policía en zona de frontera con Venezuela. | Foto: Guillermo Torres Reina

La información indica que Hernández, antes de emprender el viaje adonde sus familiares, estaba asignado al CAI del barrio Mutis de la ciudad de Bucaramanga. Días antes, el uniformado había visitado a su mamá en San Gil y tras recibir la autorización del período de vacaciones, optó por coger camino para ir a visitar a su papá, según indicaron familiares del hoy fallecido a diferentes medios regionales.

Todo parece indicar que el policía, que viajaba en una motocicleta, fue interceptado por hombres fuertemente armados, quienes lo obligaron a subirse en un camino y se lo llevaron con rumbo desconocido.

La noticia de la muerte de Hernández se da en momentos en los que el gobierno del presidente Gustavo Petro adelanta procesos de negociaciones de paz con los grupos criminales más fuertes en el país y que no han dejado de delinquir como ocurrió con el caso del Estado Mayor Central de las disidencias de Iván Mordisco.

Las disidencias de Iván Mordisco mantienen una arremetida violenta en departamentos como Cauca, Nariño y Valle del Cauca. | Foto: AFP or licensors

Las acciones criminales de este grupo no se han detenido y, por el contrario, tienen regiones sitiadas de violencia como son los departamentos del Cauca, Valle del Cauca y Nariño. Pese a que el Gobierno les concedió un cese al fuego, este grupo criminal mantiene acciones terroristas en contra de la fuerza pública y la población civil dejando muertos y heridos con cada acción que ejecutan.

El Gobierno también inició conversaciones de paz con la Segunda Marquetalia de Iván Márquez, en un acto que ha generado bastante polémica, en donde el comisionado de paz, Otty Patiño, lamentó la muerte en una operación de las Fuerzas Militares de alias Hermes, uno de los cabecillas que delinquía en el departamento de Nariño.

Sobre este caso, Patiño calificó como un hecho fatídico y pidió perdón a las disidencias de Márquez por el actuar de las Fuerzas Militares en este caso.