Desde el pasado 18 de febrero, los familiares de la colombiana María Estella Gómez, quien residía en el estado de Florida en Estados Unidos, no tenían conocimiento alguno del paradero de la mujer o de lo que le habría podido ocurrir. Por esto las autoridades de Boynton Beach iniciaron una intensa labor de búsqueda para determinar cuál era el motivo de la desaparición de la connacional.
Lamentablemente en las últimas horas informaron que la mujer fue encontrada sin vida en una residencia que al parecer sería propiedad de Roberto Colón, un hombre de 66 años con quien la colombiana se había casado para hacer toda la tramitología y obtener la nacionalidad y así formalizar su estado migratorio, según confirmaron algunos familiares a las autoridades. Por esto, los policías arrestaron al hombre bajo cargos de asesinato premeditado en primer grado.
“Nuestras más sinceras condolencias están con la familia y los seres queridos de Mary”, dijo el jefe de policía Michael G. Gregory en un comunicado. “Seguimos dedicados a esta investigación en curso y a llevar justicia a su familia”.
Los restos del cuerpo de Gómez Mullet fueron encontrados en el patio de la casa de Roberto Colón, el hombre con el que Mary se había casado hace un año. La colombiana había viajado el 18 de febrero desde Miami a la ciudad de Boyton Beach en el condado Palm Beach, donde debía encontrarse con quien ahora es el principal sospechoso de su muerte.
De acuerdo con las autoridades, Colón dijo que en principio había contratado a María Stella como cuidadora de su mamá en la ciudad de Hialeah, pues, según él, sufre de demencia. Parte del arreglo incluía que se casarían, para que él le diera la ciudadanía americana a la mujer a cambio de que ella prestara todos sus servicios para el cuidado de la madre del hombre.
Sin embargo, la colombiana tuvo que dejar el trabajo porque fue despedida por el sospechoso, quien dijo a las autoridades que había acusado a María Stella de robarle a su mamá y por eso le había dicho el pasado 18 de febrero, en su casa de Boyton Beach, que no podía seguir trabajando para ellos. Desde ese día su familia perdió todo rastro con la mujer.
El 23 de febrero los detectives fueron informados de que unas horas después de la última vez que un conocido tuvo noticias de María Stella el 18 de febrero, oficiales de la policía de Boyton Beach respondieron a una llamada de una persona, preocupada porque había encontrado una cartera ensangrentada. Adentro, los detectives encontraron un rosario con un crucifijo, que pertenecía a la víctima.
Posteriormente, las autoridades interrogaron a Colón, quien reconoció que había discutido con María y se había golpeado contra un muro, por lo que su teléfono se cayó y se le salió la batería. Dijo que después él había salido a una cita médica y cuando regresó la mujer ya no estaba, aunque su carro sí. Sin embargo, los oficiales del caso encontraron que todo el historial de su celular había sido borrado y que además en el garaje de la casa del hombre había sangre que, según el sospechoso, pertenecía a su perro que estaba herido.
De María Estella se sabe que era una mujer de 45, bacterióloga oriunda de Corozal, Sucre. Se fue de Colombia hace dos años para buscar mejores oportunidades y así brindarle una mejor calidad de vida a sus dos hijos, pero su vida se apagó poco tiempo después de emprender su sueño. Ahora, las autoridades investigan si la persona con quien se casó fue la directamente responsable de su muerte.