Semana: ¿cómo se entiende el periodismo digital actualmente?Daniel Moreno: Tenemos que entender que el periodismo digital no es solo una nueva plataforma. Recordemos en Estados Unidos cuando surgió ese concepto de ‘nuevo periodismo‘, bueno pues el periodismo digital es una nueva forma de hacer periodismo y aquí se trabaja para los lectores. Yo le insisto mucho a mis reporteros que esto involucra moverse por diferentes formatos, y les digo que no estoy desmeritando su reportaje cuando contenemos la información en un video de un minuto para redes sociales, sino que, todo lo contrario, le estamos dando una nueva vida.Conseguir la información y escribir el texto es solo la mitad del trabajo. El otro 50 por ciento es cómo vendes tu trabajo. Le sugerimos esta investigación de Animal Político: La estafa maestraSemana: ¿Qué tan importante es la interacción con los lectores?D.M.: Mándenle un mensaje por twitter a un medio tradicional gigante diciendo que hay algo mal: una corrección ortográfica por ejemplo. No hay nadie del otro lado. Las cuentas de redes sociales de los medios tradicionales los operan robots, ¿a quién le importa lo que diga el lector? en Animal Político nos importa lo que dice la opinión. Y parte fundamental que deben tener los responsables de redes es responder preguntas, atender comentarios. Los lectores mandan continuamente información. Nunca tendré los reporteros suficientes, pero siempre tendré suficientes lectores para entender lo que está pasando. El periodismo digital te abre la puerta para saber qué piensa, qué quiere y qué sabe el lector. Y eso los periodistas tradicionales nunca lo han tenido, por el formato y no por el gusto. Esa es la gran revolución del periodismo digital. Y también nos abre la puerta para revivir el periodismo que para muchos está herido de muerte por internet y la competencia enloquecida que hay con medios que se dedican básicamente a la frivolidad.
Semana: Animal Político precisamente se aleja de los temas frívolos…D.M.: Y a nivel político, entendiendo que trabajamos para los lectores, hemos logrado un sitio que tiene siete millones de visitas al mes sin deportes, sin cultura y sin espectáculo. Y aspiramos a tener este año verticales como Animal Gourmet, de comida y obvio mucho más comercial, y ojalá tengamos Animal Deportivo o Animal Turístico, lo que sea. Esto pensando en un modelo de negocio como pasa en los periódicos en donde las secciones más soft terminan sosteniendo económicamente a las secciones más hard. Pero esta posibilidad de tener siete millones de visitas ha sido sin concesión en la lógica de "vamos a meternos al espectáculo que al fin y al cabo el espectáculo a todo el mundo le dan visitas"Le recomendamos de Animal Político: El sabuesoSemana: ¿por qué cree que esto ha funcionado? D.M.: Primero porque hemos seguido muy puntualmente estas reglas de la relación con los lectores. Segundo porque hemos trabajado mucho la idea de que los principios básicos del periodismo digital deben ser, obvio, los mismos que cualquier otro periodismo. En eso sí somos iguales. Siempre será más importante para nosotros corroborar que salir primero. Nunca seremos los primeros en salir, porque no nos interesa. Lo que le ofrecemos al lector es confiabilidad, credibilidad, rigor y corroboración. Esa es nuestra carta de presentación permanente. Entonces la gente sabe que si subimos la nota es porque está confirmada. Y hay un tercer punto que me parece importante. Los periodistas queremos tumbar al presidente, tenemos síndrome de Watergate. Pero lo cierto es que si sabemos que trabajamos fundamentalmente para los lectores es indispensable abrir un área de información útil y de servicios dentro del contexto de cada uno de los medios que te permita generar visitas sin pervertir el perfil de tus lectores. Semana: ¿cómo así pervertir el perfil de los lectores?D.M.: Por ejemplo, en México los puentes festivos sobran, esos días en los que los periodistas nos quejamos "porque todo el mundo descansa y entonces yo trabajo". Todos los diciembres generamos una nota que se llama ‘Los puentes del año que viene‘, y como conocemos las herramientas básicas del mundo digital, sabemos que esa va a ser una de las notas más leídas. Porque cada vez que se acerca un puente la gente se mete a google y pone: puentes 2018. Y salimos bien ranqueados. Entonces como pensamos que es una nota frívola y no va a tumbar a ningún presidente entonces no vale. Pero esa nota va a llevar a que uno de cada tres lectores entre a otro contenido de Animal Político.
Semana: ¿Qué implica escribir para lectores digitales?D.M.: Quizá otra de las diferencias que siempre subrayaré es que el lector digital es diferente al del impreso, eso es una obviedad. Pero implica mucho trabajo para nosotros. Yo era un periodista político que había tenido la oportunidad de tener cargos directivos. Político en el sentido más clásico: cubrí campañas electorales y esas cosas. Cuando empezamos en Animal Político la lógica era hacer periodismo político y muy pronto nos dimos cuenta que lo que opina un senador en México no le importa a absolutamente a nadie. Nunca hemos publicado una entrevista con un político, no nos interesa y a nuestros lectores menos. Y hay 200 medios tradicionales que están preocupados en eso. A Peña Nieto lo persiguen 60 reporteros ¿por qué voy a tener a un reportero siguiendo a Peña Nieto básicamente para transferir lo que dijo? Y lo mismo y la cámara de diputados... Esa cobertura política es de medios tradicionales. Los medios tradicionales cubren la política a partir de los políticos que se intentan comunicar con los ciudadanos. Nosotros en el mundo digital invertimos la ecuación: hablamos con la gente que se asume como ciudadano, como gente que hace política desde el nivel más básico de mejorar la colonia a, por supuesto, mejorar el país. No cubrimos de arriba para abajo, sino de abajo para arriba.Semana: Muchos lectores se dejan llevar por noticias y portales que divulgan lo que no es ¿cómo combatir las noticias falsas?D.M.: Los periodistas tenemos que asumir la autocrítica de que los primeros generadores de noticias falsas hemos sido los propios medios: faltando al rigor, reproduciendo acríticamente lo que dice la clase política. Yo decía que las noticias falsas más promovidas por los medios tradicionales en América Latina han sido las promesas de campaña, ¿no? ponemos comillas y adelante... Primero hay que asumir esa parte. E importa este tema porque hemos perdido la credibilidad entre los lectores. Los medios no gozan de todas las simpatías porque también les hemos mentido, porque el sistema de medios en general se ha aliado con el poder. Segundo, entonces cuando ven una noticia de nuestros medios pues dudan, cuando no deberían de hacerlo. Entonces tenemos que recuperar las bases éticas del periodismo y ser obsesivos en ese tema.Semana: ¿Por qué se generan las noticias falsas?D.M.: Las noticias falsas hay que verlas en dos componentes: quiénes generan y quienes divulgan. Son dos cosas distintas porque las personas que viralizan una noticia falsa son inocentes en todo caso, pues alguien que no tiene toda la cultura informativa se sorprende con una nota y la comparte. Pero los responsables son en realidad tres: los empresarios disfrazados de periodistas que generan sitios que promueven la difusión de noticias falsas solo para ganar dinero. Creas una página, alimentas con noticias falsas y generas dinero con publicidad. Ese tipo de negocios es uno de los orígenes centrales. Segundo: las estrategias de campaña. La clase política tiene sus propios generadores de noticias falsas, porque sabe que difamar al adversario da votos. Y tercero hay una veta internacional, todo el rollo que hemos leído sobre los rusos y demás, creo que tiene componentes reales. Creo que la primera labor es documentar quienes hacen esto.