Un juez de Popayán envió a la cárcel a dos hombres señalados de abusar sexualmente de cuatro menores de edad en el departamento del Cauca.
Por su parte, la Fiscalía General de la Nación obtuvo una sentencia condenatoria y realizó una imputación a los hombres que, en hechos distintos, habrían cometido agresiones sexuales contra los menores.
Las pruebas aportadas por un fiscal del Centro de Atención e Investigación Integral a Víctimas de Violencia Sexual (Caivas) permitió que un juez penal de conocimiento confirmara la condena a 15 años de cárcel contra Wilfrido Guevara Ule, quien fue encontrado responsable del delito de actos sexuales con menor de 14 años.
Los hechos ocurrieron en 2014, en una escuela de la Palma en Inzá (Cauca), donde el procesado habría abusado de su condición de docente para realizar tocamientos de índole sexual a una estudiante menor de edad. La situación se repitió entre marzo y abril de 2018 con otra alumna en un salón de la institución educativa.
El sentenciado, quien se encontraba prófugo, fue capturado por funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) en el barrio Centro de Popayán.
De otro lado, Humberto Enrique Burbano Erazo fue imputado por el delito de acceso carnal abusivo con menor de 14 años y actos sexuales con menor de 14 años agravado. El hombre habría abusado sexualmente de dos niñas, menores de edad, en una vivienda en la que era inquilino en el barrio Yanaconas de Popayán (Cauca).
Servidores del CTI, con apoyo de la Policía y el Ejército Nacional, capturaron al hombre cuando salía de la vivienda donde residía. En las audiencias concentradas, el investigado negó su responsabilidad en los cargos y le impusieron media de aseguramiento en establecimiento carcelario.
Aberrante caso en Bogotá
La secretaría de Educación del Distrito, en compañía de diversas entidades del orden distrital y nacional, lideró el diálogo y acompañamiento a la comunidad educativa de Bosa, tras el repudiable hecho del que recientemente fue víctima un estudiante de una institución educativa oficial de Bogotá.
En una mesa de diálogo que contó con la participación de familiares del niño víctima, directivas de la secretaría de Educación y de la institución educativa, líderes estudiantiles, delegados de la Personería de Bogotá, el ICBF, la Alcaldía Local, Policía de Infancia y Adolescencia, secretaría de Gobierno y secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia. Se escucharon las diferentes voces y solicitudes que fueron atendidas de forma inmediata, lo que permitió acordar que el Colegio retomara el pasado viernes 12 de julio su actividad.
De acuerdo con la secretaría de Educación, se iniciará un ejercicio de resiliencia y recuperación de la confianza con padres, estudiantes y docentes, que permita la restauración emocional de la comunidad educativa y el fortalecimiento de la institución. El ejercicio será liderado por el rector, con el acompañamiento de la secretaría de Educación a través de la Dirección de Participación y de la Oficina de Convivencia Escolar.