Varios puntos en la decisión que aumentó la condena en contra de Epa Colombia por los delitos de daño en bien ajeno, perturbación en el servicio de transporte público e instigación para delinquir con fines terroristas, indicaron que la posibilidad de la detención domiciliaria o libertad condicionada no eran una opción. Sin embargo, en criterio de algunos expertos penalistas consultados por SEMANA, por ahora la influenciadora podrá continuar en libertad hasta tanto la sentencia quede en firme.
El abogado y profesor universitario Camilo Burbano advirtió que existen dos posibilidades para que la condena quede en firme: la primera es que la defensa de Epa Colombia no radique recursos en contra de la decisión del Tribunal de Bogotá, y la segunda, a años de distancia, que la Corte Suprema de Justicia resuelva la casación que eventualmente interpongan en favor de la empresaria.
El abogado explicó que esa sería la razón por la que los magistrados del Tribunal no ordenaron una captura inmediata de Epa Colombia, a la espera de que su defensa defina si presenta el recurso de casación, porque en la Corte Suprema de Justicia podrían revocar la pena y el Estado –particularmente la rama judicial– se tendría que enfrentar a una nueva demanda.
“Si la señorita no presenta ningún recurso, la condena quedaría en firme, momento en el cual se libraría una orden de captura para ser trasladada a un centro de reclusión. Si, por el contrario, sus abogados presentan alguno de los recursos mencionados, la condena no estaría en firme y muy seguramente el Tribunal de Bogotá no liberará ninguna orden de captura”, dijo el experto.
La polémica por el aumento de la condena en contra Epa Colombia se libró en las redes sociales, el escenario por excelencia de la influenciadora; sin embargo, los expertos advierten que no se puede hablar de desproporción en la decisión del Tribunal, pues justamente fue la misma Daneidy Barrera la que aceptó los cargos que en su momento imputó la Fiscalía.
El abogado penalista Alejandro Carranza aseguró, por el contrario, que los magistrados del Tribunal debieron analizar con mayor detenimiento el caso y entender que el objetivo de la pena, por lo menos en el caso de Epa Colombia, estaba cumplido con la decisión de primera instancia, esto es: la resocialización de la persona sentenciada y la posibilidad de reparar los daños.
“El fracaso del sistema penal le envía a la sociedad un mensaje en contravía de lo que la pena busca construir preventivamente. Por eso es que la sociedad está comparando diferentes condenas por delitos que considera más graves, con la conducta y la pena impuesta a Daneidy Barrera”, dijo el abogado.
Por su parte, el fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, aseguró que respetar las decisiones judiciales es respetar la institucionalidad del país y, en ese orden de ideas, celebró la que tomó el Tribunal Superior de Bogotá.
“Que se discutan las decisiones de parte de la sociedad, muy bien, que se respeten las decisiones judiciales elemento central de la institucionalidad. Como fiscal general celebro porque este es un momento importante para la propia justicia, así como los abogados penalistas muchas veces salen y despotrican de la Fiscalía porque es su objetivo natural buscar sentencias absolutorias”, dijo.
La condena en contra de Epa Colombia aún no está en firme. A la defensa de la influenciadora le queda la posibilidad de presentar una impugnación especial por el delito que revivió el Tribunal de Bogotá y, además, el recurso de casación ante la Corte Suprema de Justicia. Solo en ese escenario se podría liberar una orden de captura.