Iván Duque  recibió este viernes uno de los sablazos más duros de su mandato. En una conversación informal con un grupo de peridistas, Donald Trump aseguró que el presidente colombiano es “un buen tipo” pero que "no ha hecho nada" para reducir la cantidad de droga que sale de Colombia a ese país. La frase podría considerarse dura al venir de un presidente norteamericano, y en tono no tiene muchos antecedentes en la relación entre ambas naciones, pero en el gobierno de Trump podría ser sútil. El magnate ha llamado “rata” a su ex abogado, “escoria traviesa y llorona” a una periodista de ABC, “estúpida” a una actriz y “cara de caballo” a otra. Sin embargo, la expresión con la que se refirió a Duque sorprendió y generó malestar en la Casa de Nariño. El presidente colombiano es quizás el gobernante de América Latina más cercano a la Casa Blanca. Al final de su visita a ese país, en febrero de este año, cuando le preguntaron cómo calificaba, de uno a diez, ese encuentro, Iván Duque no tuvo inconveniente en contestar tranquilamente “yo creo que un diez”. La respuesta reflejaba la tranquilidad de una luna miel de varios meses que había tenido con el gobierno del impredecible y temperamental magnate. Las relaciones Washington-Caracas-Bogotá forman parte de un triángulo cuyo lado Duque-Trump es el más sólido. Hay dos temas que unen, pero también que dividen la relación de ambos gobiernos. El primero es Venezuela. Las relaciones Washington-Caracas-Bogotá forman parte de un triángulo cuyo lado Duque-Trump es el más sólido. El actual inquilino de la Casa Blanca tiene un interés especial en la crisis política de ese país por el peligro que significa para la relación petrolera tradicional entre los dos países. Duque en esa materia ha ganado un espacio y de la mano de Estados Unidos ha liderado el cerco diplomático a Nicolás Maduro. A pesar de que en temas esenciales, como la intervención militar, las posiciones con el presidente norteamericano son encontradas, Trump ha dejado saber que ve en el mandatario colombiano un aliado estratégico para esa causa. Puede ver: "Es un buen tipo (...) pero no ha hecho nada": Trump sobre Duque en el tema de las drogas Las drogas, sin embargo, es un problema mucho más de fondo, en el que díficilmente Duque logrará éxitos o protagonismos. Como explicó Michael Shifter en un texto para SEMANA, el auge en la producción de coca en Colombia durante los últimos cinco años alarma al gobierno y al Congreso de Estados Unidos, y preocupa tanto a republicanos como demócratas. “El tema está al tope de la agenda bilateral, más aún cuando halcones de la guerra contra las drogas ocupan cargos en la administración Trump. Es poco probable que en esta se hable de “responsabilidad compartida”, como lo hacían presidentes anteriores”. El presidente del dialogo Interamericano señala que en ese asunto, Duque se mueve en aguas turbias pues debe manejar las tensiones políticas que este tema genera en Washington y Bogotá y evitar que la relación se ‘renarcotice’, una situación evidente después de las declaraciones del viernes. El auge en la producción de coca alarma al gobierno y al Congreso de Estados Unidos, y preocupa tanto a republicanos como demócratas "Déjenme decirles algo, Colombia tiene un nuevo presidente, es realmente un buen tipo. Yo lo conocí, vino a la Casa Blanca. Él dijo que iba a detener las drogas", comenzó diciendo Trump en ese encuentro durante una visita a los trabajos en un dique en el lago Okeechobee, en Florida. Pero no paró ahí. A reglón seguido agregó que "hay más drogas saliendo de Colombia ahora mismo que antes de que fuera presidente. Él no ha hecho nada por nosotros". El gobierno colombiano respondió inmediatamente. El canciller Carlos Holmes Trujillo aseguró que “el gobierno viene enfrentando con toda firmeza y contundencia el problema mundial de las drogas ilícitas y las amenazas que plantea para la estabilidad institucional, el desarrollo económico sostenible y el progreso social de todos los colombianos”, señaló. Trujillo enfatizó que la cooperación internacional “es fundamental para enfrentar eficazmente el problema mundial de las drogas ilícitas” y reiteró la importancia y vigencia que para Colombia representa el “principio de responsabilidad común y compartida”. "Déjenme decirles algo, Colombia tiene un nuevo presidente, es realmente un buen tipo". El canciller también presentó un listado de cifras sobre el trabajo que han hecho para contener el crecimiento de los cultivos ilícitos, reducir el consumo y la oferta y desarticular los emporios criminales. Contó que el programa de sustitución de cultivos ilícitos pasó de cubrir 50.000 hectáreas en 2017 a 85.000 hectáreas en 2018. En ese mismo período la incautación de marihuana pasó de 197 a 250 toneladas y la de cocaína de 390 a 450 toneladas. En 2017 fueron destruidos 3.434 laboratorios de base de coca y cocaína y 4.174 al año siguiente. Le sugerimos: Incautación: 1,2 toneladas de cocaína halladas en un contenedor en Cartagena Por otro lado, aseguró que entre agosto y diciembre de 2018, se extraditaron a 62 personas por delitos relacionados con el narcotráfico, principalmente a EE UU, aumentó los grupos móviles de erradicación de 23 a 100 a un costo de 100.000 millones de pesos —que en lo corrido de este gobierno hasta febrero han intervenido 40.000 has de cultivos ilícitos, unos 5.747 al mes—y se confiscaron 8.350 bienes por valor de dos billones de dólares. Pronunciamiento del Canciller @CarlosHolmesTru: el Gobierno del Presidente @IvanDuque está implementando una política integral para enfrentar con firmeza y contundencia el problema mundial de las drogas ilícitas pic.twitter.com/mPJ47GCTb0 — Cancillería Colombia (@CancilleriaCol) 30 de marzo de 2019 Sin embargo, la defensa más dura vino de Álvaro Uribe. “El partido Centro Democrático rechaza las declaraciones del Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sobre la evolución de la producción en Colombia y envió de cocaína a los Estados Unidos”, trinó. Según el exmandatario, el país norteamericano “debió descertificar al gobierno de Juan Manuel Santos que con su política de impunidad permitió que los cultivos ilícitos superaran las 200 mil hectáreas y la producción anual pasara de 200 a más de mil toneladas. Sin embargo, no lo hizo ante tan macabra realidad”. Vea también: ¿Por qué algunas estrellas del fútbol caen en el mundo del narcotráfico? El partido Centro Democrático rechaza las declaraciones del Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sobre la evolución de la producción en Colombia y envió de cocaína a los… https://t.co/YDFzwQNgJu — Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) 29 de marzo de 2019 La frase de Trump y las posteriores respuestas desde Colombia dejaron en evidencia dos cosas. La primera que, a pesar de lo que desarrollen ambos gobiernos respecto a Venezuela, el tema de la droga seguirá siendo el principal dolor de cabeza en la relación de ambos países, y que en ese aspecto -con las cifras subiendo a pesar de los esfuerzos- muy díficilmente a Duque le irá bien ante la Casa Blanca. Eso aumentará la presión por lograr resultados y por volver a la mano dura tipo fumigaciones con glifosato o perseguir judicialmente a las Farc por ese asunto. La segunda es que evidentemente frente a Donald Trump nada se puede dar por descontado. El presidente norteamericano cambia constantemente de opinión y de humor, y por es cualquier cosa puede pasar.