La muerte de un bebé, que su propia madre dejó abandonado en el interior de un carro mientras ella ingresaba a un motel, tiene conmocionado al país. La aberrante historia llena de inconsciencia y descaro ahora está escribiendo un capítulo en la Fiscalía, uno que tendrá, con seguridad, como protagonista a la mamá del menor y víctima. Para los expertos penalistas un caso de “homicidio doloso y agravado”.
Marlon Díaz, profesor universitario y vicepresidente del Colegio de Abogados Penalistas, aseguró que, de manera preliminar, se podría hablar de un caso de homicidio culposo, pero a la luz de los hechos y después de analizar el contexto, el escenario cambia al igual que el tipo penal, es decir, el delito que eventualmente imputaría la Fiscalía.
“Se trata de un caso muy triste que demuestra los problemas y carencia de valores en nuestra sociedad se adecuaría inicialmente en el tipo penal de homicidio culposo agravado por la ingesta de bebidas embriagantes”, explicó Díaz.
El asunto es que la ley contempla varios agravantes que, para este caso, encajan como piezas de un rompecabezas con una conclusión lógica; judicialmente, se trata de un caso de homicidio doloso y agravado, que dejaría como responsable a María Camila Mengual, la madre del niño, quien se supone tenía la obligación de cuidar y proteger a su hijo.
“No obstante consideramos que por las características del hecho por la posición de garante de la madre y su acompañante, respecto de un menor de edad, no estaríamos hablando de una conducta culposa, sino de una conducta dolosa agravada, específicamente por el parentesco de la progenitora”, advirtió el vicepresidente del Colegio de Abogados Penalistas.
El asunto es que María Camila, como madre del bebé, asumió la responsabilidad y con ello las consecuencias legales de sus actuaciones, ese hecho la cambia de asiento en una posible imputación de cargos, de un homicidio culposo, es decir, sin la intención de cometerlo, a un homicidio doloso, en que el indiciado es consciente de las consecuencias y aún así continúa en su actuación.
La joven sabía bien que dejar al bebé en el vehículo era un riesgo y decidió correrlo mientras ella pasaba la faena con su acompañante en el motel que ahora se convirtió en la escena del crimen y donde la Fiscalía adelantó los actos urgentes con el ánimo de recaudar el material probatorio.
Otros expertos penalistas como el abogado Camilo Burnano, exdirector del sistema penal acusatorio en la Fiscalía, advierten incluso la pena a que se expondría la madre del bebé de resultar imputada por la Fiscalía, más de 40 años de cárcel si resulta acusada por el delito de homicidio doloso.
“Sin embargo, si las personas estaban bajo el influjo de alguna sustancia psicoactivas o alcohol, podría tener una pena mayor, que sería de los siete a los 17 años de prisión… No descartaría un homicidio doloso por dolo eventual, que ocurre cuando una persona prevé el resultado pero lo deja librado al azar”, explicó Burbano.
La Fiscalía avanza en el proceso de judicialización de este caso y eso incluye recuperar los videos de seguridad, las declaraciones de los empleados del motel, incluso de la madre de la bebé. Luego analizar el material probatorio y determinar responsabilidades que pueden llevar a una imputación de cargos.