El presidente de la República, Iván Duque, envió un duro mensaje condenando una vez más la invasión a sangre y fuego de Rusia contra Ucrania, trasladando a su vez un saludo de solidaridad al pueblo ucraniano por el sufrimiento causado por las tropas de Vladimir Putin.
En su intervención en el Foro de Migración de Varsovia (Polonia), el jefe de Estado hizo un llamado para que la comunidad internacional encuentre una solución que permita conjurar la guerra.
“Quisiera empezar expresando mi solidaridad al pueblo ucraniano que ha sufrido una invasión brutal, también un ataque por un genocidio brutal que está teniendo lugar frente a los ojos del mundo”, sostuvo Duque.
Agregó en su declaración: “Debemos elevar nuestra voz no solamente para condenar dicha brutalidad y estos actos barbáricos que van tan en contra del derecho internacional humanitario, sino que debemos expresar nuestra profunda solidaridad de apoyo a todos los ciudadanos ucranianos que estarán tratando de encontrar abrigo en otras partes del mundo”.
Anotó el jefe de Estado: “Queremos expresar nuestro reconocimiento y admiración al gobierno de Polonia con lo que ha hecho, que es un modelo, es una referencia, porque está recibiendo a millones de inmigrantes que han pasado la frontera buscando una oportunidad para encontrar estabilidad después de la devastación”.
Por otro lado, se conoció que Rusia ultima los preparativos del Día de la Victoria, con el que conmemora cada 9 de mayo la victoria soviética sobre la Alemania nazi. En esta ocasión, los actos vienen precedidos de una ofensiva militar en Ucrania y de las especulaciones en torno a posibles cambios en dicho conflicto, coincidiendo con la simbólica fecha.
El principal acto del Día de la Victoria tendrá como epicentro la Plaza Roja de Moscú, escenario de un desfile militar en presencia del presidente ruso, Vladimir Putin, y de los principales cargos políticos y militares.
Para Putin, la guerra de Ucrania no es tal. Tanto él como la cúpula rusa se ciñen al término ‘operación especial’ para referirse a la ofensiva e, incluso, han castigado a medios y activistas que aludan a términos como guerra o invasión, en una escalada represiva que se ha convertido en una única línea de discurso mediática.
No obstante, en círculos políticos occidentales se prevé que el presidente de Rusia pueda utilizar el Día de la Victoria para declarar oficialmente la guerra, según fuentes consultadas por la cadena estadounidense CNN. En la práctica, facilitaría la movilización de más tropas y reservistas, después de que Moscú haya recurrido incluso a mercenarios extranjeros para contrarrestar la resistencia ucraniana.
El ministro de Defensa británico, Ben Wallace, también dijo en una entrevista a la emisora LBC Radio que Putin pasará página de la “operación especial” para hablar abiertamente de guerra. La premisa sería clara: “Estamos en guerra contra los nazis y necesito más gente”, declaró Wallace.
La “desnazificación” de Ucrania ha figurado de forma recurrente entre las justificaciones rusas de la invasión, a pesar de que los objetivos han ido variando una vez que las fuerzas rusas no han logrado avanzar en zonas urbanas clave como Kiev. Las operaciones se concentran ahora en “liberar” el Donbás, aunque para ello también se siguen llevando a cabo ofensivas en toda las zonas del este y el sur.
Finalmente, Moscú ha evitado especular sobre el potencial cambio de la terminología, pero sí ha salido al paso de las dudas sobre una resolución apresurada del conflicto. “Nuestras tropas no basarán sus actividades de forma artificial en una fecha específica”, zanjó el ministro de Exteriores, Sergei Lavrov, en una reciente entrevista con el conglomerado italiano Mediaset.